La Nación
Robándoles delincuentes a las calles: fe y trabajo por el futuro 1 18 mayo, 2024
NEIVA

Robándoles delincuentes a las calles: fe y trabajo por el futuro

Cientos de jóvenes huilenses están sumergidos en el mundo de la delincuencia y la drogadicción. Muchos de ellos son asesinados o terminan sus días como habitantes de la calle o como prófugos de la justicia. Cientos de jóvenes huilenses están sumergidos en el mundo de la delincuencia y la drogadicción. Muchos de ellos son asesinados o terminan sus días como habitantes de la calle o como prófugos de la justicia. Sin embargo, en medio de múltiples dificultades, hay una fundación que busca fortalecer el proyecto de vida de los adolescentes delincuentes o adictos, convencidos de que aún, hay esperanza por el futuro. GINNA TATIANA PIRAGAUTA G. LA NACIÓN, NEIVA Los jóvenes delincuentes, desorientados, adictos, con familias disfuncionales o entornos sociales difíciles; tienen un futuro que construir y un proyecto de vida que fortalecer. Este es el objetivo de la Fundación Hogares Claret, según la

Cientos de jóvenes huilenses están sumergidos en el mundo de la delincuencia y la drogadicción. Muchos de ellos son asesinados o terminan sus días como habitantes de la calle o como prófugos de la justicia.

Cientos

legislación nacional, el lugar donde tienen que ser remitidos los adolescentes con problemas legales o de consumo de sustancias psicoactivas. El trabajo no es fácil. La población cambia constantemente y la mayoría de las familias de los jóvenes son disfuncionales. William Sierra Ángel, el director terapéutico de la Regional Huila de Hogares Claret, aseguró, que generalmente, en el interior del núcleo doméstico de estos adolescentes, el concepto de ley es muy pobre. “En términos de límites, estos hogares son absolutamente laxos y consideran que esa es la forma adecuada de relacionarse con sus hijos; esto acarrea que los jóvenes terminen involucrados en el delito. Incluso, tenemos casos en los que algunos familiares intentan ingresarles la droga a los jóvenes cuando están adentro de la institución o los comunican telefónicamente con sus secuaces que están en la calle”, aseguró el psicólogo. “Son cosas que tenemos que regular todo el tiempo, pero sobre todo procuramos que el muchacho aprenda, a partir de su propio recurso, a colocar una distancia. Incluso, que él pueda ‘defenderse’ de una familia que le acolita actitudes que solo lo perjudican.”, puntualizó. ¿Qué hacer? Estadísticamente, en la fundación, de 10 jóvenes que reciben tratamiento terapéutico, solo tres realizan una

El taller de motos es un aprendizaje llamativo para los adolescentes
El taller de motos es un aprendizaje llamativo para los adolescentes
resocializan efectiva. Sin embargo, para Sierra, esas son tres vidas valiosas que se han salvado de las calles y que van a ser útiles a la sociedad. “Hay muchachos que encuentran una respuesta positiva y después de salir nos visitan y nos cuentan que están estudiando o trabajando en panadería, carpintería o mecánica de motos, de acuerdo a lo que aprendieron en el centro.” “Hay otros jóvenes que definitivamente dicen no, no y no. Sin embargo, todo el tiempo estamos nosotros trabajando con ellos. Cada vez que un muchacho que sale de aquí, nuevamente comete un delito, es herido o asesinado, para nosotros es doloroso.” “Nos preguntamos, ¿Qué dejamos de hacer? Porque si bien sabemos que el adolescente responde por un asunto legal, nosotros procuramos que en el interior del espacio el muchacho aprenda y desarrolle habilidades y que ve una parte distinta de la vida. Si ya lo intentó desde el delito, que lo intente desde lo legal, que entienda que tiene opciones.” Para el profesional, generalmente, el joven trasgresor actúa por impulso, porque no tiene una capacidad de reacción propia ni quien lo regule afuera, quien  lo ataje, lo oriente o le hable al respecto. Entorno
Con fe y esperanza por el futuro realizan su trabajo William Sierra Ángel, director terapéutico; Mery Constanza Rojas, gerente administrativa de la Regional Huila y Orlando González, director del Centro.
Con fe y esperanza por el futuro realizan su trabajo William Sierra Ángel, director terapéutico; Mery Constanza Rojas, gerente administrativa de la Regional Huila y Orlando González, director del Centro.
“En la estructuración de su personalidad, estos jóvenes tienen muy arraigado el delito. Consideran que su forma de vida es la adecuada y ésta siempre va a ser la manera de conseguir sus cosas. Algunos hogares apoyan la actitud delincuencial del joven, pero hay otras que no y uno no entiende porque está el muchacho aquí, si sus familias son perfectamente constituidas y no les falta nada”, expresó el psicólogo. ¿Por qué incurrió el joven en el delito? Según el especialista, el entorno social es fundamental. “Todas las personas condenan el delito, pero también se prestan para este. No denuncian al delincuente del barrio o de la calle. Además, la ley laxa, permite que el muchacho crezca en su delincuencia”, manifestó Sierra. “El adolescente es afectado por el delito, independientemente de que esté inmiscuido en él, básicamente él es una víctima porque está incurriendo en una serie de actos y no tiene consciencia de lo que esto acarrea en su futuro y en su presente”, puntualizó. Organización interna En Hogares Clarter, hay un grupo de jóvenes que son ubicados en el área transitoria, donde están los detenidos por la Policía o los que tienen asuntos pendientes con la Fiscalía. El juez decide si se quedan en medida privativa de la
: En los talleres de carpintería, los jóvenes tienen la oportunidad de aprender un arte para sus vidas
: En los talleres de carpintería, los jóvenes tienen la oportunidad de aprender un arte para sus vidas
libertad en el centro especializado o tienen medidas ambulatorias. En la sede de La Primavera de la Fundación, se manejan esta clase de programas. Si los jóvenes se quedan en investigación de la Fiscalía o del Juzgado, son trasladados a Internamiento Preventivo (IP). Durante el tiempo que está ahí, por escaso que sea, realizan la intervención psicológica, abren la historia clínica del adolescente (el record) y comienzan el trabajo terapéutico. “Se contacta a la familia, el joven participa de los encuentros de las mañanas, de las asambleas y de las diferentes terapias. Si el juez decide que se queda interno, los trasladamos a la modalidad de Centro de Atención Especializado (CAE)”, aseguró Orlando González, director del Centro. En el CAE se hace un seguimiento legal y personal del adolescente e inician el trabajo formativo con un equipo interdisciplinario de profesionales, para que logré un aprendizaje y unas habilidades que le permitan participar en la sociedad positivamente. Asimismo, en Hogares Claret realizan un trabajo con los jóvenes que están en riesgo, que son remitidos por Bienestar Familiar o que consumen sustancias psicoactivas pero que no tiene problemas legales. Además, trabajan con adultos con problemas de adicción. ¿Qué hacen los adolescentes en la institución? En el centro especializado existen diferentes intervenciones, no solo de capacitación, sino psicológico y social, con el fin de que el joven empiece a organizar asuntos individuales de su vida y de su relación familiar. “Procuramos que el muchacho se concientice que si bien esto es una sanción, también puede ser la oportunidad de corregir a tiempo asuntos fundamentales para su vida, su proyecto y su futuro. Es un trabajo dispendioso, pero nosotros tenemos fe”, afirmó el Director Terapéutico de Hogares Claret. La rutina de los jóvenes que están internos inicia a las 6:30 a.m. Antes del desayuno se realiza la meditación. Después se hace el encuentro de la mañana. Es un espacio terapéutico donde el adolescente expresa como se siente, como comienza el día, que dificultades emocionales tiene o si ese día se levantó contento, motivado y si tiene expectativas cuáles son. Posteriormente, dependiendo del tipo de intervención que se vaya a hacer en el día, los jóvenes pasan a la parte educativa, escolar o al área de formación de talleres: panadería, mecánica de motos o carpintería. En el centro cuentan con una sala de sistemas para prácticas. “También hay capacitaciones por parte de diferentes estamentos universitarios o gubernamentales. Desde el área psicológica y social se llevan a cabo intervenciones individuales y grupales. Además, se realizan actividades recreativas con el apoyo del Inder: torneos de futbolito o básquetbol, carreras de reconocimiento, entre otras”, aseguró Mery Constanza Rojas, gerente administrativa de la Regional Huila de Hogares Claret. “Se busca que el joven todo el tiempo este interactuando en asuntos positivos, reguladores, formadores o de aprendizaje que estén bien organizados, que tengan un diario vivir, una estrategia de aplicación. El propósito es que el joven genere una reflexión de lo que quiere hacer cuando salga del centro.”, manifestó la profesional huilense. Talentos en potencia Al interior de la institución existen potenciales talentos artísticos de algunos adolescentes, especialmente en el dibujo y la interpretación musical. Los jóvenes cuentan además con una emisora interna. Delincuencia vs educación “Para las personas que están dentro del concepto de la ley, el delito es aterrador; pero para el joven, tiene una ganancia. Sino, no estuviera allí. Por lo tanto, se le tiene que proponer algo llamativo, que lo seduzca en su forma de vivir y de interactuar socialmente”, manifestó William Sierra. Consumo de sustancias psicoactivas La mayoría de los adolescentes que están en la Fundación, tienen problemas de adicción a sustancias psicoactivas. “No le voy a negar que al interior del centro se consumen, pero nosotros buscamos todo el tiempo de evitarlo y hacemos un trabajo muy fuerte al respecto. Cada vez que se detecta un consumo dentro de la institución, se intervine sancionatoriamente. No del orden físico, sino, del orden del privilegio. Lo que más le gusta les es omitido”, aseguró el Director Terapéutico. “Generalmente, estos jóvenes nunca recibieron una sanción de la familia. La sociedad los rechazó, los vetó y los excluyó. Nosotros hacemos la transición entre la sanción y el aprendizaje de habilidades sociales, para una exitosa reinserción a la sociedad”, expresó William Sierra.