Desde su nacimiento, hace cien años, la Cruz Roja Colombiana ha estado ligada a la historia del país y ha sido testigo excepcional de todas las tragedias.
La entidad, sin ánimo de lucro, nació en plena batalla de Palonegro (Santander) en 1900, durante la Guerra de los Mil Días. Un grupo de médicos encabezados por Carlos Putnam asumieron la primera misión humanitaria para atender en el campo de batalla con carretas improvisadas como ambulancias a decenas de heridos. Este hecho valeroso fue presentado en el segundo Congreso de la Sociedad Médica reunido en Medellín en enero de 1913.
El médico huilense Adriano Perdomo Trujillo, nacido en Yaguará, urgió la creación de “una sociedad de auxilios sanitarios voluntarios para socorrer a los desgraciados en las calamidades públicas en tiempos de paz y atender a los heridos y enfermos en tiempos de guerra”. La propuesta fue aprobada por unanimidad.
Dos años más tarde nació la Sociedad Nacional de la Cruz Roja Colombiana. La entidad fue fundada el 30 de julio de 1915 en el teatro Colón de Bogotá promovida por los médicos Hipólito Machado y Adriano Perdomo Trujillo.
Desde entonces la Cruz Roja ha brillado con luz propia llevando una voz de aliento a los más necesitados.
El país recuerda las misiones valerosas realizadas en el incendio de Manizales en 1925, en el conflicto con el Perú en 1932 o las violentas protestas ocurridas en Bogotá tras el magnicidio del caudillo liberal Jorge Eliécer Gaitán el 9 de abril de 1948. El organismo demostró también su labor durante la Toma del Palacio de Justicia. En las grandes tragedias también estuvo en la primera línea. Su labor humanitaria quedó como ejemplo en los terremoto de Popayán y del eje cafetero, durante la erupción del volcán nevado del Ruiz y la tragedia de Armero que dejó más de 23.000 personas muertas y 75.000 más afectados. La Cruz Roja como otros organismos de socorro demostró sus abnegados servicios durante la avalancha del río Páez que dejó más de 800 muertos y decenas de pueblos indígenas arrasados entre Huila y Cauca.
En el Huila, también ha dejado huella imborrable el médico Roberto Liévano Perdomo, presidente honorario de la benemérita institución y fundador de la seccional del Huila el 4 de junio de 1972. En este centenario rendimos también tributo a todos los voluntarios y servidores que siguen sembrando esperanzas, aun en las tragedias.
“Desde entonces la Cruz Roja ha brillado con luz propia llevando una voz de aliento a los más necesitados”.
Sorpresivamente la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (Anla) anunció una investigación contra Emgesa por el llenado de El Quimbo. La misma entidad avaló las propuestas de la multinacional e introdujo 14 modificaciones a la licencia ambiental para facilitar el inicio de la operación. ¿Realmente iniciará un proceso sancionatorio?