En una reunión sostenida entre los transportadores y el Gobierno Departamental, en la noche de ayer se acordó la suspensión provisional de la protesta que había sido prevista para hoy. Se establecieron tres días de plazo para que el Gobierno Nacional responda una serie de peticiones del gremio.
El paro convocado para las primeras horas de este martes por parte de las empresas transportadoras del Surcolombiano, quedó suspendido provisionalmente.
Tras el anuncio del gremio transportador de entrar en paro ante la aguda crisis vial que se presenta en el departamento del Huila y no evidenciarse soluciones contundentes a la situación, el Gobierno Departamental logró persuadir a los promotores de la protesta de desistir de las vías de hecho, previo acuerdo, fueron establecidos tres días de plazo para que el Gobierno Nacional responda una serie de peticiones del sector.
Luego del encuentro las partes determinaron una serie de acciones:
En primera medida, hoy en horas de la tarde, la empresa Enel–Emgesa entregará el informe de los estudios y diseños de ingeniería de detalle que permitirá la rehabilitación de un carril en el sector Gigante – Garzón.
Por su parte, Invías concederá el jueves el resultado de la re-evaluación de carga de los puentes de la vía Garzón–Zuluaga-Gigante para determinar acciones en lo concerniente al transporte de pasajeros.
El Ejército está evaluando la posibilidad de instalar un puente militar – Bailey. Entre tanto, el Gobierno Departamental está realizando la gestión ante el Gobierno Nacional para la instalación del puente, una vez entregada la evaluación por parte del Ejército el día jueves primero de agosto, si ello es pertinente técnicamente.
Asimismo, se insistirá al Gobierno Nacional la solicitud de la transitabilidad 24 horas en el sector de Pericongo, eliminando la restricción nocturna.
Y finalmente, se exigirá nuevamente el mantenimiento de la vía nacional Isnos–Paletará–Popayán y la solicitud del subsidio al combustible que han elevado los transportadores.
El jueves primero de agosto en horas de la tarde se cumplirá un nuevo encuentro con los transportadores para esperar respuestas definitivas del Gobierno Nacional a las peticiones huilenses.
“No nos han cumplido”
Las reducciones del 70% en el despacho de pasajeros y 80% en el transporte de carga, hacia el centro y sur del departamento y el país, por el crítico estado de la malla vial alterna destinada tras la emergencia sobre el sector de Bengala, entre Gigante y Garzón, han puesto en jaque al sector transportador de carga pesada y liviana del Surcolombiano.
El gremio asegura que se han presentado incumplimientos de los compromisos pactados con el Gobierno Nacional, mientras la situación se agudiza.
En su visita al departamento del Huila la semana anterior, la ministra de Transporte Ángela María Orozco, anunció, entre otras cosas, una reducción del 50% en el valor del peaje en Altamira, y que con el concesionario actual recuperaría el doble flujo vehicular por Pericongo, según el gremio, no se ha cumplido con todo a cabalidad.
“La semana pasada asistimos a una reunión convocada por el Gobierno Departamental donde estuvo presente la señora Ministra de Trasporte, llegamos a algunos puntos pero no se nos ha solucionado lo acordado, únicamente el 30% del parque automotor de todas las empresas de pasajeros, de carga y encomiendas están trabajando, por las precarias condiciones en que están las vías alternas destinadas tras la crisis de la vía entre Gigante y Garzón”, indicó Sandra Mildred Charry, asesora del transporte y vocera del gremio transportador.
Agregó, “las vías alteras tanto para tránsito liviano como pesado no están lo suficientemente estructuradas para que los vehículos puedan circular, no hay señalización ni buena visibilidad, pues estas carreteras no son propicias para este tipo de transporte. Estamos agravando la malla vía del Departamento y dañando nuestro parque automotor” señaló.
Por su parte Juan Gabriel Gasca Silva, presidente de la Asociación de Camioneros del municipio de Garzón dijo que “las vías alternas no están hechas para el transporte pesado. Pasar de Neiva a Garzón antes tomaba un tiempo de tres horas, ahora son 4 o 5 días por la carretera, ya no toleramos más. El Gobierno se comprometió a arreglar estas variantes que están en pésimas condiciones, o habilitar un carril donde ocurrió el deslizamiento, pero no lo ha hecho”.
Finalmente, tras la reunión con el Gobierno Departamental, Sandra Mildred Charry, vocera del gremio transportador dijo “hemos dado esta tregua porque, aclaradas las situaciones, nos dimos cuenta que las decisiones no dependen del Gobierno Departamental sino del Gobierno Nacional.”