La Contraloría General de la República investiga los retrasos en la construcción de la Torre de alta complejidad La Contraloría General de la República investiga los retrasos en la construcción de la Torre de alta complejidad, que debía entregarse terminada el 23 de octubre pasado. El avance es apenas del 36,08 por ciento. RICARDO AREIZA LA NACIÓN, Neiva La Contraloría General de la República asumió la investigación sobre los retrasos que viene registrando la construcción de la torre materno infantil de alta complejidad, proyectada desde el anterior gobierno. La obra, financiada con recursos de regalías petroleras, sigue en la ruta crítica y no pudo entregarse, como estaba previsto en el contrato adjudicado al consorcio español Lopesan Fronpeca. Según el cronograma, el contratista debía entregar el 23 de octubre pasado los cinco pisos terminados con una unidad de urgencias pediátricas y maternas, sala de cirugía, hospitalización, UCI, unidad de apoyo y diagnostico, parqueaderos, suministro de dos ascensores y las áreas de servicios. Pero no pudo. La falta de un flujo financiero acorde con la magnitud del macroproyecto, es a juicio de los interventores, la principal razón para el retraso. El avance, según el último informe de interventoría es del 36,08 por ciento con un acumulado de 63,92%. (Ver cuadro). Hasta el momento la firma sólo ha ejecutado $5.216 del anticipo que alcanza los $7.008 millones. Y lo más grave: el respaldo financiero no llega. La firma para ganarse el contrato certificó que tenía la capacidad financiera para ejecutar la obra con sus propios recursos. Sin embargo, ha dependido sólo de los anticipos. Por esa razón la Contraloría asumió de oficio la investigación fiscal para determinar las eventuales responsabilidades de quienes intervinieron en el proceso de contratación desde la realización de los estudios previos, los cuales, no tuvieron los sustentos técnicos para una obra de esa dimensión. En dificultades La obra comenzó en medio de serias dificultades en noviembre del 2011 lo que sirvió como soportes para solicitar la ampliación del plazo previsto para terminar la obra, por razones no atribuibles al contratista. A la falta de personal, se sumaron inconsistencias técnicas en el estudio de suelos, falta de coordinación y planeación, situación que se agravó con la época de lluvias. Además, repercutiendo en la calidad de los concretos aplicados en la cimentación del proyecto, generados por bajas resistencias, que fueron afectando el cumplimiento del cronograma inicial. Nuevo plazo Sin embargo, la junta directiva autorizó prorrogar el plazo inicial para entregar la obra que venció el 23 de octubre pasado y le concedió 60 días adicionales “por causas no atribuibles al contratista”. Ahora, ante la imposibilidad física para terminar la obra, se pedirá una nueva prórroga. El plazo se extendió hasta diciembre y podría prorrogarse otros meses, siempre y cuando se demuestren los avances y la capacidad financiera para terminarla. Pese a que la gobernadora Cielo González Villa, consideró que es “mejor un buen arreglo que un mal pleito” y que “el interés es que se garantice la terminación de la obra”, los tres meses adicionales, solicitados, no han sido autorizados. Aunque el contratista aumentó el ritmo y se lograron algunos avances, las medidas no son suficientes para terminar la obra en los tiempos y términos establecidos. “El avance en octubre fue cuantificado en un 6%, porcentaje, que aunque todavía es insuficiente. El contratista está haciendo esfuerzos económicos y técnicos para poder cumplir el contrato”, reconoció el gerente del Hospital, Jesús Antonio Castro. 
La obra registra un retraso del 63,92 por ciento y sigue en la ruta crítica.
