A menos de dos meses de las elecciones, el exsenador y líder conservador, Hernán Andrade Serrano, destapa sus cartas. Dice que la carrera por la Gobernación del Huila no está definida y que le ve opciones a Sandra Hernández. Advierte que “la candidatura de Casagua a la Alcaldía de Neiva está muy consolidada”.
Jesús Antonio Rojas Serrano
La opinión de Hernán Andrade Serrano siempre será importante en una contienda electoral. Desde su condición de exsenador, sigue moviendo los hilos del conservatismo huilense. El expresidente del Congreso de la República conversa con LA NACIÓN y habla no solo de las próximas elecciones sino que evalúa al gobierno de Gustavo Petro.
Más de un año después, ¿cómo cree que le ha ido al gobierno de Gustavo Petro?
Bastante regular porque su apuesta central, la anhelada paz total, está muy enredada. Petro está hoy sin respaldo popular, sin mayorías en el Congreso y con pésimas relaciones en las altas Cortes y la institucionalidad. Y lo más grave es que todo ello va a terminar repercutiendo en el factor económico del país.
Pero, ¿por qué está enredado?
Jesús Antonio, tengo la esperanza que, por ejemplo, lo del Eln salga bien. Con el tema de las disidencias, tengo profundas dudas. Lo que está pasando en el Huila es supremamente grave. No nos llamemos a engaños: hay municipios carnetizados, sin movilidad en la zona rural, algo que no se veía desde la negociación del presidente Pastrana. El Huila está paniqueado con la presencia de las disidencias a lo largo y ancho del departamento. El narcotráfico es otro tema muy difícil para Petro. Hay falta de liderazgo. Hoy tenemos un gobierno deslegitimado y nadie negocia así; con Samper no quisieron negociar ni las Farc ni los paramilitares.
¿Ve enredadas las reformas sociales de Petro en el Congreso?
Lo ideal es que hubiera acuerdos sobre algunos puntos. Me parece que nada que se haga por acuerdos de partidos, va a funcionar. El acuerdo nacional jugando al menudeo, comprando un grupo de parlamentarios, no le va a servir. Se necesita una discusión tranquila para identificar ciertos puntos y sacar algunas reformas adelante. Por ejemplo, la reforma laboral debe representar mejoras laborales para varios grupos de trabajadores como los domiciliarios, pero concertando. Si el llamado a un acuerdo nacional no lleva una sentada de partidos, nada va a pasar en el Congreso. Petro debe tener en cuenta además que el tan cacareado balconazo, no le ha resultado porque su popularidad es hoy del 32%; ganó con el 51 o 52, subió al 60% de popularidad y en este momento ha perdido la mitad del respaldo, que representan 6 o 7 millones de personas.
¿Cuál es hoy el rumbo de la economía colombiana?
El panorama económico es difícil porque Petro privilegia unos sectores, pero golpea al empresariado. Evidentemente, está saliendo plata del país y la inversión ha decaído. Los signos vitales de la economía colombiana no pintan bien.
¿Cree en la teoría del ‘golpe blando’ de la que ha vuelto a hablar el presidente Petro?
Eso es un invento del presidente Petro. Jesús Antonio, el ‘golpe blando’ se lo ha dado la propia campaña y Day Vásquez y Nicolás Petro, cuyos escándalos son un golpe durísimo para la institucionalidad. No tiene ni pies ni cabeza echarle la culpa a los demás de sus propios errores. La ineficiencia y la falta de ejecución del gobierno son, entre otras cosas, por las constantes rotaciones en ministerios, en donde barrieron hasta los funcionarios y contratistas que conservaban la memoria histórica de las entidades. Ojalá, reaccione el gobierno Petro.
¿Son o no un asunto de Estado las inexplicables ausencias del presidente Petro?
Son asunto de Estado. Yo llamé a dos representantes amigos para que se le midieran al tema. Eso está regulado en buena parte del mundo. Uno no puede faltar a 90 actos públicos y echarle la culpa a Ingrid Betancourt. Yo no creo en el tema de la enfermedad de Petro. Recuerdo a Juan Manuel Santos con el cáncer de próstata o Angelino Garzón con su derrame cerebral; ellos salieron a decir lo que les pasaba. Petro debería salir, con su equipo médico, y despejar cualquier incertidumbre. Indudablemente, la salud trasciende la esfera privada. Nosotros los hombres públicos no podemos tener reserva de nuestra condición física y mental.
Hablemos del plato fuerte: las próximas elecciones, ¿qué va a pasar?
El tema nacional nunca va ligado con el tema regional, pero esta vez sí se conectó directamente. El regular momento del gobierno Petro se está reflejando en lo local. Ahí está el ejemplo en Neiva del candidato del Pacto Histórico que adhirió a Amín Losada. El regular momento del gobierno se reflejará en las elecciones locales.
¿Ve, entonces, castigados en las urnas a los candidatos de la izquierda?
Yo no sé si llamarlo castigo. Pero le pongo este dato: en Bogotá, Cali, Medellín y Barranquilla, la imagen negativa de Petro es fuerte. Es probable que pueda ganar en otras regiones, pero en esas ciudades capitales y la región central no lo veo ganando. El panorama no es bueno. Una meta clara del presidente Petro era tomarse políticamente las elecciones regionales y eso nunca lo ha ocultado ni en privado ni en público.
¿Qué lectura tiene de la contienda hoy por la Gobernación del Huila?
La veo muy clara, en qué sentido: Villalba, con toda su trayectoria y méritos, está afectado por el cansancio de una hegemonía; eso que dijo que Luis Enrique no era pupilo de él no se lo cree nadie. No veo mejor jefe de debate para Sandra Hernández y para Rodrigo Lara Sánchez que el propio Luis Enrique Dussán, como Gorky es el mejor jefe de debate de Casagua. Si en la próxima encuesta que el Diario LA NACIÓN publique y el Dr. Rodrigo no aparezca con más del 30%, significa lo que es una verdad de a puño en el departamento: el 70% no le queremos jalar a la continuidad del dúo Dussán-Villalba.
¿En esa pelea entre los dos Rodrigos, le ve posibilidades a Sandra?
Mucho. Jesús Antonio, todavía esto no está definido. Esperemos los resultados de la próxima encuesta contratada por LA NACIÓN. Lo que pasa también es que la gente no ha resuelto, pero evidentemente Rodrigo Villalba es el de más reconocimiento departamental y nacional. Lo que la gente está por definir está entre Sandra y Lara. Y claro que le veo ‘chico’ a Sandra, una mujer inteligente, seria y capaz; le falta nivel de reconocimiento. A mí me pasó cuando me enfrenté a Escandón; yo creía que a mí me conocían porque había sido presidente del Concejo y diputado; cuando salió la encuesta de LA NACIÓN me puse bravísimo porque Escandón salió con el 80% de reconocimiento y yo, apenas, con el 32%. Los políticos vivimos convencidos que nos conocen. A Sandra Hernández le hace falta un nivel de reconocimiento, pero se está recorriendo el departamento.
Dejemos algo claro: ¿por quiénes va a votar el 29 de octubre?
Yo tengo mi voto cantado, comprometido y convencido y es por Sandra Hernández. Lo que pasa es que a estas alturas, Jesús Antonio, yo no tengo ataduras en la lengua; yo no tengo a quien rendirle cuentas; la única causa es el voto mío. Hace meses definí lo de Casagua porque fue el único coherente. Cuando usted ve ese reguero de candidatos a la Alcaldía de Neiva, salvo Yilber Saavedra y alguna otra excepción, la gente está premiando, ante el desgobierno, campeón e intergaláctico de la corrupción que fue Gorky Muñoz, al concejal que fue coherente y consistente en el Concejo. Todo el reguero que hay, la mayoría, vivió en las fuentes de corrupción y burocráticas de Gorky. La gente no es pendeja y sabe quién le ha hecho la oposición a Gorky. Lo de Neiva está bastante definido y está por definir el próximo gobernador o gobernadora de los huilenses. Yo voy a votar por Sandra Hernández y German Casagua.
¿Qué le llama la atención de Casagua?
Uno siempre en política quiere al candidato ideal. Casagua es joven, mantuvo coherencia en el Concejo, le hizo oposición a Gorky y va a recibir la ciudad destruida en las finanzas y con temas difíciles como alumbrado público y catastro. Casagua y otras administraciones tendrán que llegar para recuperarnos de la mala administración de Gorky Muñoz.
¿No le ve futuro a Wilker Bautista, el candidato del ‘gorkysmo’?
No. Eso es una afrenta a la ciudad. Y no es porque Wilker no merezca el respeto como ciudadano, pero Gorky sabe que lo de Wilker no tiene presente ni futuro, y al final, le va a sacar la maleta a todos los que ha ilusionado, incluido el propio Wilker. Un candidato que lo asocien con una persona que debe estar llegando al 80% o 90% de desfavorabilidad está condenado al fracaso. Ahí hay candidatos que pueden subir como Jorge Andrés, Amín Losada o Héctor Javier. La candidatura de Casagua está muy consolidada.
A juicio suyo, ¿cuáles son los grandes problemas que debe enfrentar el próximo mandatario de los neivanos?
Como Gorky no hizo nada, cualquier otra cosa será una mejoría. Yo admiro y respeto a Jaime Ramírez Plazas, un buen secretario de Hacienda que a buena hora para Gorky le aceptó el cargo. Hay que recomponer las finanzas del municipio; habrá que mirar los contratos de alumbrado público y catastro; habrá que mirar malla vial. Hay que organizar un ‘bloque de búsqueda’ de las viviendas con las que Gorky ilusionó a los neivanos. Casagua tiene que montar un gabinete de lujo, sin ataduras partidistas, con gente técnica muy competente.
¿Cómo cree que le va a ir al Partido Conservador para las próximas elecciones?
Vamos a tener una merma nacional. Ha habido errores del Partido Conservador a nivel nacional. Por ejemplo, declararse partido de gobierno de Petro; eso dolió y nos dolió a muchos conservadores. A mí, particularmente, me pegaron un sombrerazo porque yo estaba en la campaña de Juan Carlos Echeverry a la Presidencia y a bolígrafo definieron que era David Bargüil. Por eso, estoy bastante alejado de la esfera nacional. El Partido ha obrado mal y eso le abrió paso a esas nuevas expresiones como Fuerza Democrática y Salvación Nacional.
¿A nivel regional qué?
Ha habido una labor de identificar candidaturas que ha hecho el directorio departamental en cabeza de Perdomo, Esperanza, Jaime Felipe y yo que ayudo de vez en cuando. Lástima lo del Concejo de Neiva, en la que no hubo lista porque Gorky se llevó unos candidatos para otras listas y nadie quiso competirle a Johan Steed. La lista a la Asamblea quedó bien conformada; es gente con mucho presente y futuro: Angelo, Omar Alexis, Wilmer Alvarado, Silvio Vásquez Jr., Norberto Castaño y Alexandro Salazar. Esa lista nos garantiza mínimo 60.000 votos y nos puede llevar a dos diputados y salvar el tercer diputado. Vamos además a tener entre 8 y 10 alcaldes. Si bien tenemos un momento difícil, el panorama en el Huila no va a ser un desastre. Los conservadores no estamos muertos. La falta de Senado y Cámara, que es una falta lamentable, no incidió en que no vayamos a tener representación en lo regional. Seguimos conservando presencia. Estamos vivos.