Dos meses y medio han pasado desde que un grupo de delincuentes asesinó a cuatro miembros de una sola familia de pequeños comercializadores de café, en el centro poblado de Villalosada, municipio de La Plata.
El 13 de marzo, a eso de las 7:05 p.m. cuando Juan Ramírez, acompañado de su esposa, sus hijos y una nieta intentaban descansar luego de una larga jornada, varias personas armadas irrumpieron en su casa, aprovechando la oscuridad, buscando un supuesto dinero que finalmente no encontraron, casi acaban con su familia.
Fue cosa de solo algunos minutos para que los delincuentes, optaran por castigar a sus víctimas al encontrarse con su resistencia. El resultado, una orgía de sangre y muerte que hasta la fecha, sigue inquietando a los pobladores de Villalosada.
Y aunque en su momento, las autoridades prometieron que unos días el caso tendría que ser resuelto, dado que hasta allí se había ordenado desplazar al mismo equipo de investigadores que trabajó en el caso de la masacre de varios niños en Caquetá, las cosas siguen igual.
Todo ello, mientras los pobladores de Villalosada se quejan de que la inseguridad se ha incrementado.
Entre tanto, la Policía por su lado, sostiene que mantienen su mirada fija en la localidad y que las averiguaciones para dar con los responsables del crimen, están en pleno desarrollo.
El panorama
Según José Rafael Solano, presidente de la junta del acueducto, en el centro poblado de Villalosada, las noches se han convertido en el momento propicio para los delincuentes y de paso aumentan el miedo y la desconfianza entre la propia comunidad.
“Como si fuera poco a partir del fatídico Viernes 13 de Marzo de 2015, la comunidad está enferma, las noches se han vuelto muy complejas, para los habitantes de Villalosada, el miedo está la está limitando. Los relatos y comportamientos de las personas así lo demuestran, hay reproches y sentimientos de culpa, hay desconfianza generalizada, la gente no encuentra espacios adecuados para reconocer y procesar tales sentimientos”, segura Solano.
Ante esta situación incluso, la propia comunidad le pidió a la alcaldesa de La Plata, municipio al que pertenece el centro poblado, que se les apoye con un grupo de profesionales de la sicología con el fin de ayudarlos a superar lo ocurrido con la familia Ramírez Pisso.
No obstante, Solano señala que no se ha recibido respuesta alguna a la petición de la comunidad.
Pero como si todo lo ocurrido fuera poco, se ha denunciado que tras los hechos registrados, se han presentado varios asaltos a viviendas e inclusive en el colegio de bachillerato de la localidad, fueron hurtados varios computadores así como la pantalla gigante de la sala de internet.
Todo aquello, pese a la presencia que por momentos hace la Policía y el Ejército, según señala la comunidad.
Presencia continua
La comunidad clama un puesto de Policía propio para el centro poblado. Según Solano, es urgente, pues los pobladores coinciden en que precisamente debido a la falta de autoridades en la zona, los delincuentes están haciendo de las suyas.
Además, insisten en que después de la masacre, no ha pasado nada para resolver el caso. “No estamos en contra de tan ingentes esfuerzos del Estado por esclarecer estos aberrantes crímenes, solo queremos preguntar ¿Qué pasa con los resultados de la investigación de la masacre de Villalosada?”, se pregunta Solano.
Temen que el caso se convierta en parte de las frías estadísticas de impunidad, como ha sucedido en otras ocasiones.
Sin embargo Solano sostiene que en Villalosada sus pobladores saben que aunque ha habido esfuerzos por parte de las autoridades en la investigación de los hechos, también creen que el tiempo ha pasado sin aparentes resultados positivos.
“La comunidad está y estará pendiente del desarrollo del esclarecimiento y captura de los culpables de esta masacre. Nuestra indignación está y permanecerá hasta tanto esta investigación rinda sus frutos”, afirma Solano
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‘Sí estamos trabajando’
Ante la preocupación de la comunidad de Villalosada por una posible impunidad en el caso de la masacre de varios miembros de la familia Ramírez Repisso, el comandante de la Policía Departamento Huila, coronel Santiago Camelo, advirtió que las investigaciones están en plena marcha.
Señaló que si bien es cierto que el grupo de investigadores que tiene a su cargo aclarar el crimen se ha encontrado con una situación más compleja que la que manejaron con los niños asesinados en el departamento de Caquetá.
“Es más complejo porque la obtención de las pruebas ha sido más complicado. Porque en el inicio de la investigación no había muchos elementos materiales de pruebas que nos permitieran acercarnos aún más pero se fueron obteniendo poco a poco. Se ha hecho una buena presión, hemos obtenido unos testimonios que nos permiten ya apuntar hacia unos responsables y esperamos que en unos días muy próximos entregar las capturas de todos”, explicó Camelo.
¿Sin Fuerza Pública?
Y ante las denuncias de los habitantes de Villalosada, sobre el presunto abandono de la Fuerza Pública, el coronel Camelo se mostró sorprendido con las afirmaciones.
Dijo que si bien no hay presencia permanente cuenta con un escuadrón móvil de carabineros que cuando no están en el centro poblado, están en Gallego, o La Argentina.
Incluso, agregó que cuando el escuadrón se va, cubre con los llamados Cobra, que es un grupo motorizado. Asimismo, indicó que los investigadores no se han ido de la región y que además la Alcaldía les ha dado alimentación, alojamiento para poder permanecer allí.
Camelo insiste en que la Fuerza Pública está todo el tiempo custodiando la región, con algunas excepciones, es decir, cuando se requiere de su presencia en otros puntos de la geografía plateña.