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Derecho de petición, señor Procurador – Piter Bonilla Díaz

Doctor Ordoñez. Pretendo hacerme vocero de la inmensa mayoría de la población del Huila; la que no votó por Cielo Gonzales Villa Doctor  Ordoñez. Pretendo hacerme vocero de la inmensa mayoría de la población del Huila; la que no votó por Cielo Gonzales Villa para la Gobernación. Le hago cuentas: El potencial electoral del departamento para los comicios anteriores fue de 701.344 ciudadanos. Sumados los que lo hicieron por Carlos Mauricio Iriarte (142.017), con los de Jorge Fernando Perdomo (114.846), son 256.863, frente a los de Gonzales, quien obtuvo 147.612, arronjan una diferencia de 109.251, que, agregados a la masa abstencionista, que fue de 296.869, asciende a 553.732. Es precisamente la que manifiesto interpretar. Soy concreto: En anteriores comentarios siempre destaqué que el único organismo de control que merecía credibilidad era la Procuraduría General de la Nación, especialmente la cabeza principal por su honestidad, eficiencia y prontitud en la promulgación de decisiones. La Contraloría General relacionó los hallazgos registrados durante el cuatrienio en que Gonzales Villa estuvo como alcaldesa de Neiva, de la siguiente manera: 9 penales, 42 disciplinarios y 27 fiscales  para un  total de 79 con diferente gravedad. El último de TIG-SA, que fue por el que  se le preguntó a usted aquí en su última visita y que reconoció su morosidad, pese a encontrarse en la Sala Disciplinaria y que fuera fallado severamente con destitución e inhabilidad el 27 de abril pasado, en segunda instancia ¡todavía no se conoce! Se compara con el caso del ex senador Merlano, que siendo mucho más reciente y muchísimo menos grave, ya se determinó de manera ejemplarizante. Es por ello que el alto concepto que se tenía de su señoría ha caído ostensiblemente. Los rumores son que Ordoñez está pensando más en su reelección que en los intereses colectivos. Que  allá sospechosamente le están haciendo el juego a la tan cuestionada gobernante con su mañoso estilo de dilatar las comparecencias judiciales y buscar los vencimientos de términos. Además de otras cosas nonc santas. ¡Y usted que es tan  católico, señor Procurador! Ahora bien. Para armonizar con la sensible incertidumbre que gravita en el sentimiento de la sociedad, en mi condición de periodista y al amparo del Derecho de Petición previsto en el Artículo 23 de la C.N., le solicito respetuosamente  se sirva, en el término legal  comunicarme el estado actual del proceso en referencia y a su turno señalar si el mismo procedimentalmente acusa extemporaneidad para su fallo definitivo. Para el efecto de inmediato haré lo correspondiente. Por último. Le doy un dato que le llega del cielo…El resquemor que antes le tenía por la sanción en primera instancia, súbitamente se ha convertido en aplauso  por su probable reelección. Es lo que así mismo nos está haciendo pensar que la sal se ha corrompido.