La Nación
Édgar Artunduaga 1 4 mayo, 2024
COLUMNISTAS OPINIÓN

Édgar Artunduaga

Rodrigo Villalba Mosquera

Tuve la fortuna de conocer a Édgar Artunduaga hace muchos años cuando llegó, procedente de Pitalito, a desempeñarse como normalista en el núcleo escolar El Guadual de Rivera.  Al poco tiempo lo vi desempeñándose como periodista en RCN Neiva y de allí escalando posiciones y demostrando que su vida era el periodismo.

Artunduaga fue un gran reportero y un excelente entrevistador, dueño de una pluma mordaz con la que logró posicionarse como uno de los mejores periodistas del país. Artunduaga pasó por la política, pero permaneció en el periodismo.

Recuerdo que saltó a grandes medios de la época: fue reportero y columnista de El Espacio, Radio Santa Fe, Todelar y luego a las grandes ligas en Caracol Radio. El país recuerda la salida de Artunduaga de La Luciérnaga, endilgando injerencia del gobierno de turno, y un corto exilio en España. Ese fue el episodio que terminó empujándolo a participar en política.

Después de Caracol inicia un proyecto titánico en la emisora más popular de Bogotá, Radio Santa Fe, creando una de las figuras más destacadas de la radio en Colombia, el “Batallón de amigos”, la que posteriormente sería la base de su curul como Senador liberal, donde su mayor electorado estuvo en Bogotá. Pero su amor por el Huila lo llevó a cambiar la ecuación política, apostándole a que su mayor fortín electoral fuera su tierra, sin embargo, la respuesta no fue la esperada.

Artunduaga hizo empresa en lo que realmente sabía y le gustaba. Creó el Sistema AS (Artunduaga Sánchez), tres frecuencias en Rivera, Baraya y Pitalito, las que operó y consolidó hasta posicionarlas en los primeros lugares de la radio en el Huila. Luego decidió emprender otros proyectos en Bogotá y arrendó sus emisoras a Caracol. En este tiempo dedicó gran parte de su tiempo a escribir textos periodísticos de gran impacto como ‘HP’ (Honorables Parlamentarios), la Historia de la radio en Colombia y Finales Tristes. El último de los 17 libros que escribió fue la biografía de su gran amigo Hernán Peláez.

En la última década dirigió la Cadena Todelar con grandes resultados. En el año 2017 volvió a su tierra a asumir el control de su cadena de emisoras, logrando en poco tiempo consolidarlas. Artunduaga falleció haciendo lo que más le gustaba, periodismo, el que ejerció con valentía, sin importar los detractores ni qué podía implicarle ser un periodista “sin pelos en la lengua”.

De su vida personal destaco el gran afecto por sus hijos. Su gran amor, Marcela Bobadilla (Pachela). Artunduaga no se cansaba de decirle a los amigos que Pachela era su complemento, su polo a tierra.

Mantuve con él una muy buena amistad y me impactó su repentino fallecimiento. Lamento profundamente su partida. Artunduaga fue y seguirá siendo un referente para el periodismo del país y en especial de la región.