Bahamón Jaramillo lleva seis meses en campaña. En ese tiempo se ha reunido con líderes dirigentes políticos de la región, y ha presidido muchas reuniones en la mayoría de las comunas de la ciudad.
Y aunque dice ser ser consciente de que no tiene trayectoria política, está seguro de que su experiencia en el sector privado le permitirá dirigir una ciudad que a su juicio, necesita quién la dirija como una verdadera empresa.
¿Cómo se ha sentido haciendo campaña?
Demasiado bien. Me ha parecido un ejercicio gratificante desde todo punto de vista porque yo nunca había participado en política y nunca he tenido un cargo público, y llego a hacer una tarea completamente diferente, que ha sido absolutamente propositiva. A la comunidad le ha gustado mucho que un candidato venga con propuestas vanguardistas,con propuestas de ciudad, de estructuración y de cambio. Eso ha sido bien recibido y me ha generado la posbilidad de seguir trabajando, de acercarme a la gente y encontrar que se está pidiendo a gritos, un cambio hacia la gerencia de lo público. Eso me hace sentirme comprometido con cada una de esas voces de ánimo que me da la comunidad.
Usted como nuevo en esta actividad, ¿ha percibido que la gente está cansada del político tradicional?
Es un tema absolutamente normal en el comportamiento humano, las personas siempre están buscando algo nuevo en sus vidas y fincan en esa posibilidad de cambio muchas esperanzas. Y es una ciudadanía que tiene muchas necesidades. Vemos que hemos mejorado, sin duda, pero de todos modos la gente dice que necesita una persona que venga con un chip diferente, y que trate de hacer las cosas de una manera diferente para que de verdad redunde en bienestar social. Pero no es solo decir que se les va a pavimentar una calle, o poner un centro de salud, una escuela. El bienestar social viene de la macroestructuración de proyectos que de verdad dejen una huella firme y que permitan que la ciudadanía encuentre que hay una ruta en Neiva, para 50 años.
¿Cómo cambiar, esa ruta. por qué hay que creerle a usted?
Creo que lo único que tengo yo para mostrar a los neivanos es mi hoja de vida que demuestra a simple vista que tenido la oportunidad y la fortuna de trabajar con multinacionales en donde el único racero es el cumplimiento de objetivos y eso me ha permitido a mí, escalar en organizaciones multinacionales, con profesionales de mucho calibre. Si la ciudadanía ve mi hoja de vida verán que he trabajado más de 18 años escalando posiciones, entregando resultados en firmas japonesas y americanas. Esa es mi carta de presentación, no vengo con un bla bla, vengo con una hoja de vida, quiero ser el gerente que soporta lo que estoy proponiendo a la ciudad. Yo quiero ser el gerente de Neiva, y estoy proponiendo mi hoja de vida al servicio de los neivanos.
Sí pero es que manejar una empresa, es muy diferente a manejar una ciudad…
Yo no lo veo de la misma manera. Me parece que una ciudad siendo parte del Ejecutivo, es una empresa. Tanto así que vemos que las mejores prácticas en el mundo de hoy se llaman APP, Asociación Público Privada. ¿Y qué quiere hacer el servicio público? Pues tomar las mejores prácticas del privado para hacer más eficiente la administración pública y eso es lo que estoy proponiendo yo. Entrar a un ente público con la trascendencia del trabajo de la gerencia, que tengamos la posibilidad de tener retos medibles, alcanzables y ambiciosos.
Algunos podrían pensar que usted trae una especie de varita mágica…
No, yo no creo que nadie sea un súper héroe y no me vengo a vender como eso. Vengo a presentarme como un profesional que quiere servirle a la ciudadanía y que quiere traer un conocimiento adquirido de varios años de servicio privado, para el servicio público. Creo firmemente en la necesidad de hacer más eficiente el estamento y esa eficiencia viene con gerencia. Lo demuestran los hechos, si usted ve Barranquilla, Montería, Valledupar y Pasto, se da cuenta de que gente del sector privado llega a tener la gerencia de una ciudad, muestra resultados inmediatos. Lo estamos viendo en estas ciudades que le menciono y en muchas de Latinoamérica. Es una tendencia mundial que se incorporen todos los elementos de la gerencia privada en el ejercicio público. Y para eso estamos nosotros.
Al menos si usted no va a hacer un cambio de tajo, ¿piensa dejar como unas pinceladas?
Es que yo no vengo a patear a nadie, no vengo a eliminar de un tajo ninguna práctica en ningún político. Lo que vengo es a imprimir un carácter gerencial en una administración pública. Y al lograrlo, vamos a encontrar que definitivamente va a haber un timonazo, que nos va a permitir encontrar una ruta que esperamos, sigan todos los alcaldes venideros. Es solo marcar una pauta pero no es ser un súper héroe.
¿Y cómo hacerlo en una ciudad tan política como esta, con unas costumbres políticas tan arraigadas?
Es que nosotros no estamos peleando con la política, venimos a construir sobre lo construido, queremos dejar de usar el espejo retrovisor en la administración pública. Y queremos es mirar hacia adelante, transformar esta ciudad proyectándola a 50 años. Ahí es donde está la gran diferencia, los demás candidatos están pensando en qué van a hacer en cuatro años. Yo quiero es pensar en qué ciudad le quiero dejar a mis hijas, y ahí radica la gran diferencia, en la proyección de ciudad. Habiendo conocido muchas ciudades de Latinoamérica y vivido en cuatro países de Latinoamérica entiendo la oportunidad del potencial que tiene Neiva para desarrollarse como ciudad y que redunde en beneficio social.
¿Cómo va a garantizar que no va a hacer lo que otros que vienen es pensando en su futuro político frenando a veces, muchos procesos?
Yo creo que la ciudadanía tiene que entender que yo no vengo a buscar puestos. No estoy buscando el beneficio personal, si fuera así, me hubiera quedado donde estaba. Estoy es tratando de que nuestra generación, tengo 40 años, sea responsable con la ciudad que nos vio nacer y que nos entregó todo lo que hoy somos. Es un ejercicio de responsabilidad ciudadana.
¿Qué percepción espera usted que se lleve el ciudadano que lo escucha en una reunión?
No le contesto qué espero que se lleve, ya me lo han dicho de viva voz, en mi cara, están felices con la posibilidad de tener un candidato totalmente diferentes, que tiene una perspectiva, que haya tenido la posibilidad de ampliar el horizonte visual y tener la posibilidad de saber hacia dónde quiere llevar los destinos de la ciudad. Ellos saben que haber vivido en Guayaquil, México, Panamá, haber tenido más de 15 países a cargo, me da la posibilidad de haber tenido suficientes elementos de juicio para no llegar a improvisar. Muchos llegan a viajar, a ver qué traen de allá pero yo viví más de siete años fuera del país y entiendo cuáles son las cosas que necesita la ciudad.
Claro, pero usted no tiene experiencia en lo político, lo administrativo…
En la gerencia sí. La experiencia política me la va a dar el día a día con la comunidad pero lo más importante no es que yo sea querido con la gente en la calle, sino que en verdad sepa manejar las riendas de la ciudad. No quiero que me recuerden como el más saludador en la calle sino como el que más hizo por la ciudad.
¿Y qué es lo primero que hay que cambiarle a esta ciudad?
Hay que cambiarle a la ciudad la idea de que somos pequeños, tenemos que pensar en grande. No podemos seguir repartiendo pobreza y vendiendo esperanzas. Los políticos tradicionales y los candidatos siempre dicen que hay que saber que somos pobres, que no tenemos recursos y la ciudad está endeudada. Ahí es donde yo difiero porque las potencialidades son las encuentran los recursos y las inversiones foráneas, ahí en donde se puede generar gestión, traer plata no solo de la Nación, sino de entes multilaterales. En Montería, el alcalde me contó que en los últimos tres años ha gestionado recursos de entes multilaterales por más de 550.000 millones, y eso hoy no lo estamos haciendo. Y hay una posibilidad muy clara de que vayamos a Kioto, Vancouver, el Banco Pupular Chino y encontremos también el apoyo de Whashington. Aquí tenemos que hacer nuestra ciudadanía relevante, de eso se trata. Un gerente tiene que hacer relevante su país o su ciudad.
¿Quién es la gente que está trabajando con usted?
Es gente entre los que hay empresarios comprometidos con la ciudadanía. En la ciudad tengo gente como Octavio Echeverry, los hermanos Villegas, Luis Roberto Cabrera, Jaime Ernesto Salas, entre otros. Pero hay gente muy buena, profesional, comprometida, que estaba esperando esta oportunidad que alguien los representara de verdad para poder asumir esa gran responsabilidad que como ciudadanos tenemos.
¿Siente que ya está comenzando a ser contado en este abanico de candidatos?
Le tengo que decir que sí, que encontramos con mucha gratitud y emoción la posibilidad de que ya estamos siendo considerados y hemos dejado de ser alguien que improvisó levantando su mano para convertirnos en alguien relevante dentro del contexto de la Alcaldía de Neiva.
Claro, porque en un principio no faltaron los que dijeron: ah un muchachito más que le dio por ser alcalde y se va a desinflar rápido…
Exacto, creo que siempre hay un nivel de incertidumbre y escepticismo que su sumado a la apatía que genera la política, trataron en su momento de menospreciar la posibilidad de alguien como yo tuviera de verdad las intenciones de participar en el ejercicio público. Pero hemos demostrado en más de seis meses que estamos comprometidos con la visión de ciudad y con el cambio que queremos construir con la ciudadanía.
¿Ha contemplado la posibilidad de alianzas o acuerdos?
Usted me dice que soy un inexperto en la política, y lo soy, pero soy una persona que creo encontrar la posibilidad en la razón que hay que sumar voluntades para llegar a la alcaldía, la gerencia que estamos buscando. Definitivamente al ser Cambio Radical un partido con vocación de poder, pues vamos a buscar que dentro de los partidos de la unidad, tendamos unos puentes y podamos ir a buscar en conjunto, lo mejor para Neiva.
¿Le ha gustado esta experiencia política?
Es una de las cosas más gratificantes que me ha pasado porque es diferente entregar todas sus energías para darle réditos a unas empresas privadas, a trabajar con todas las energías en búsqueda de transformar la calidad de vida de la gente. Ahí encuentro que esto es algo que me apasiona.
¿Cómo ha sido enfrentarse a los viejos caciques de la política?
No, yo no me estoy enfrentando a nadie. No vengo a hablar mal de nadie, ni enfrentarme a nadie. Vengo a contribuir con mi hoja de vida en lo mejor para Neiva. He entablado conversación con los senadores, algunos representantes y muchos de los candidatos, así que esto es un tema propositivo.
Si fuera elegido alcalde de Neiva, ¿cómo esperaría entregar la ciudad?
Con unos planes en marcha que vislumbren cuál es la ciudad a 50 años. Dentro de 20 años la población de Neiva será el doble, y si no nos preparamos, planeamos la ciudad que queremos tener, va a ser un descalabro para las próximas generaciones y eso no lo puedo permitir. Quiero mirar a los ojos a mis hijas y por lo menos decirles, lo intenté. Y lo que sí puedo decir es que les vamos a dar éxitos tempranos en la administración pública, metas concisas y alcanzables.
¿Se siente preparado para ser el próximo alcalde de Neiva?
Estoy absolutamente preparado y mi hoja de vida da cuenta de ello.
“… Es una tendencia mundial que se incorporen todos los elementos de la gerencia privada en el ejercicio público. Y para eso estamos nosotros”.
“…Ahí es donde está la gran diferencia, los demás candidatos están pensando en qué van a hacer en cuatro años”
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