Las ciudades intermedias tienen varios problemas en común como por ejemplo el mototaxismo y los vendedores ambulantes que tienen su origen en el conocido rebusque, alimentadas sin duda en el caso del mototaxismo por el pésimo transporte público tradicional que abusa laboralmente de los conductores, enriquece a los dueños de los vehículos y maltrata a los pasajeros.
Con relación a las ventas ambulantes, detrás de ellas existe una mafia que se lucra generalmente del contrabando y explota a quienes al sol y al agua salen a conseguir el sustento de su familia. Por supuesto que dichos problemas no se habrían acrecentado sin la anuencia de los gobiernos de varios años atrás.
No es fácil volver las cosas a la legalidad, organizar un sistema de transporte eficiente y de calidad se tropieza con la competencia que hace el “mototaxismo”, en un país donde la informalidad se volvió parte del paisaje porque las leyes no se cumplen con la absurda excusa de la obtención del sustento diario, sumado a la gravísima evidencia que ese ilegal medio de transporte también ha sido convertido en un gran negocio donde supuestos empresarios compran varias motos y las alquilan a conductores a quienes les cobran un producido diario.
Para la invasión del espacio público no bastan leyes o fallos de los tribunales, pues detrás los vendedores ambulantes también hay quienes obtienen réditos electorales haciendo aún más difícil erradicarlo, o sea que caminar por el centro de las ciudades seguirá siendo imposible pues los andenes continuarán invadidos.
Abundan los análisis técnicos, las soluciones basadas en los inconvenientes financieros y de cumplimientos de normas, pero la solución social no se ve por ningún lado, quienes llenan sus bolsillos con el transporte tradicional o el informal o con las ventas ambulantes tienen suficiente capacidad económica para frenar cualquier estrategia que conlleve una real solución.
Los candidatos hablan de estos problemas pero ninguno tiene una propuesta seria para resolverlos, critican las medidas como prohibir los parrilleros o pretender que las motos solo las manejen los dueños como en Neiva, pero no hay quien verdaderamente proponga algo novedoso, o quizás no les conviene proponerlo, es decir que un verdadero cambio a este respecto todavía está muy lejos.
AL MARGEN: A los congresistas del Centro Democrático es prudente recordarles que la DEA puede en cualquier momento recuperar la memoria con relación a quien fue clasificado como el narcotraficante No. 82, por eso es mejor que no hagan mucha bulla en Estados Unidos.
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