La Nación
EDITORIAL

Una mirada a la realidad

Desde el miércoles pasado, el coronel Livio Germán Castillo Villareal es el comandante de la Policía Metropolitana de Neiva. Su hoja de vida es interesante: es Administrador Policial, Administrador de Empresas y Especialista en Seguridad.

En sus más de 25 años de carrera en la Policía, el coronel Castillo ha estado en los departamentos de Nariño, Caquetá, Cundinamarca y Caldas. También estuvo en la Policía Metropolitana de Bogotá y desde el año pasado tenía a cargo la sub-comandancia de la Policía Metropolitana de Neiva. En su hoja de vida, se destacan además 45 condecoraciones y 200 felicitaciones.

Recibe el coronel Castillo la comandancia de la Policía Metropolitana de Neiva en un momento difícil en materia de seguridad para la ciudad. Los hurtos en todas sus modalidades están ‘disparados’ y a pesar del esfuerzo por golpear las denominadas ‘ollas’, el comercio de alucinógenos es hoy por hoy ‘caldo de cultivo’ en los barrios, comunas y corregimientos de la ciudad.

Hay que decirlo y en eso el coronel Castillo tiene que ser autocrítico, que la inseguridad en Neiva dejó hace rato de ser un tema de sólo percepción, palabra convertida en un embeleco con el cual los funcionarios y algunos oficiales buscan ‘escudarse’ para justificar el crecimiento de los delitos.

En la capital del Huila, las cifras hablan por sí solas. Basta además abrir las redes sociales para corroborar el grave panorama de inseguridad por el cual pasa la ciudad.

En resumidas cuentas, hay una realidad que es palpable e inocultable que no se puede reducir o ‘justificar’ diciendo que es una cuestión de simple percepción.

Tiene, entonces, el coronel Castillo Villareal el enorme reto de disminuir ostensiblemente los niveles de hurtos en las calles de Neiva, entre otras tareas. Claramente, tendrá que mirar para dentro y establecer el rendimiento operativo de sus hombres.

“Recibe el coronel Castillo la comandancia de la Policía Metropolitana de Neiva en un momento difícil en materia de seguridad para la ciudad. Los hurtos en todas sus modalidades están ‘disparados’”