La Nación
  El mundo llora a Maradona 1 30 abril, 2024
COLUMNISTAS OPINIÓN

  El mundo llora a Maradona

Eduardo Gutiérrez Arias

Es sorprendente el nivel de impacto emocional que en el mundo ha causado la muerte de Diego Armando Maradona, el astro del futbol argentino que tanta gloria le diera a su país y que embelesara al mundo con sus prodigiosas gambetas. La televisión, la radio y la prensa escrita están saturadas de información sobre la vida del personaje. En Argentina el gobierno del presidente Alberto Fernández decretó un duelo los días 25, 26 y 27 de noviembre en el país con motivo de su deceso. El féretro de Maradona permaneció en cámara ardiente en un salón de la Casa Rosada, el día 26 para que miles de sus compatriotas pudieran darle su sentida despedida. En Nápoles, la ciudad del sur de Italia en cuyo equipo profesional, el Napoli, jugó el argentino durante 7 años, desde 1984 hasta 1992, se proyecta rebautizar el nombre de su estadio de futbol como “Estadio Diego Armando Maradona” en homenaje al ídolo que les dio tantas alegrías y satisfacciones habiendo alcanzado en ese tiempo cinco importantes títulos entre los que se cuentan dos Scudettos y la copa UEFA, mostrando como el sur pobre de Italia  podía tener un equipo profesional de futbol capaz de derrotar a los del norte rico y opulento. Incluso algunos de ellos le ofrecieron al Diego contratos generosos económicamente, que este rechazó.

Maradona nació en el año 1960 en un barrio popular de Buenos Aires llamado Villa Fiorito. Aprendió a jugar futbol en los potreros ubicados en los alrededores de su barrio, habiendo mostrado desde muy niño los dotes excepcionales y la genialidad para este deporte. . Nunca quiso ocultar su origen humilde. Antes por el contrario, se sentía orgullosos de haber nacido en el “barro” como el mismo lo decía. Siempre rechazó las injusticias sociales, la explotación del hombre por el hombre y el dominio de los países ricos sobre los pobres. Eso lo llevó a militar en la izquierda latinoamericana y ser amigo de sus principales líderes como Fidel Castro, Hugo Chávez y Evo Morales. También a sus continuos enfrentamientos con la FIFA por sus maniobras y manipulaciones con el futbol internacional.

Pero como ser humano también padeció vicios, defectos y vicisitudes, de los que se arrepentiría y que contribuyeron a su deterioro físico, como la adicción a las drogas y el alcoholismo. De él diría Eduardo Galeano: “ningún futbolista consagrado había denunciado sin pelos en la lengua a los amos del negocio del futbol. Fue el deportista más famoso y más popular de todos los tiempos…”