¿Se imaginan que los Nule, condenados por el desfalco de más de 170 mil millones de pesos en Bogotá, o los corruptos responsables de casos como Reficar, Interbolsa, o Agro Ingreso Seguro de repente fueran perdonados y exonerados de sus delitos? Pues eso podría suceder sí se aprueba el proyecto de Ley que fue radicado en el Congreso de la República.
La iniciativa es liderada por el exsecretario de cultura de Caldas Luis Fernando Rosas condenado por corrupción, quien apelando a “la paz total”, ha presentado la propuesta para que se perdone a los procesados o condenados por hechos de corrupción en Colombia, de manera que puedan ser beneficiarios de amnistías o indultos.
Aunque el gobierno no se ha pronunciado al respecto, no sería raro que el Congreso termine aprobando esta locura, máxime cuando muchos de los actuales congresistas están investigados o tienen relación con corruptos; Alfredo Gnecco Zuleta es hijo del exgobernador Lucas Genecco condenado en 2021 por corrupción. También está el senador Julio Elías Vidal hermano de Bernardo ‘Ñoño’ Elías, investigado por sobornos de Odebrecht. El congresista Alfredo Deluque es hijo de la exsenadora Cristina Soto, investigada por compra de votos y su papá es Hernando Deluque, exgobernador de la Guajira, condenado por corrupción, entre muchos otros casos.
Huila también tendría ‘beneficiados’; recuperaría la libertad la exgobernadora Cielo González, actualmente encarcelada por corrupción; reaparecería el exalcalde Héctor Aníbal Ramírez prófugo y condenado a 12 años de prisión; también se le borrarían los procesos al exalcalde Gorky, a Pedro Suárez, Armando Ariza, Victoria Castro y numerosos exalcaldes, concejales y políticos en general.
Tramitar negociaciones con organizaciones narcotraficantes como el Clan del Golfo ha despertado la creatividad de algunos clanes para pescar en rio revuelto y legalizar sus torcidos a través de esta propuesta, tan criminal y delictiva como los mismos beneficiados.
Mientras en algunos países del mundo como China, Indonesia, Marruecos y algunos otros se castiga hasta con pena de muerte los actos de corrupción, en Colombia queremos indultarlos.
En Vietnam Truong My Lan expresidenta de una gran empresa inmobiliaria fue sentenciada a muerte hace pocos días por corrupción y su caso ha obligado a la renuncia de dos presidentes.
En Colombia no existe el castigo social, la justicia no funciona y ahora quieren indultar a los corruptos. La corrupción genera miseria, falta de oportunidades, inequidad, violencia y guerrilla. Solo falta que propongan pagarle a los corruptos para que no vuelvan a delinquir.