Andrea del Pilar Bautista Perdomo
Uno de los sectores más sensibles del comercio en general son las tiendas de barrio, muchas de ellas expuestas al riesgo por el manejo 100% de efectivo en sus transacciones, que limita su servicio y restringe el ampliar y crecer en el negocio. Dada la tendencia al uso de los canales electrónicos en el país, hoy hay una gran campaña de bancarización y de uso de datáfonos en los pequeños comercios, para que utilicen de manera móvil y sea una posibilidad de crecimiento al pasar a la onda de utilización de medios de pagos electrónicos, con beneficios en cuanto a no tener que realizar procesos complejos para obtener el servicio, sin mensualidades, ni mínimo en operaciones.
Estudios realizados creen, que, con este servicio de recibir tarjetas, se incrementarían las ventas hasta en un 30%, mejorarían el control de sus negocios por cuanto la plataforma les apoyaría para llevar un histórico de ventas, entenderían mejor la dinámica de la actividad y la más importante razón, disminuirían el peligro del uso permanente de efectivo.
Sin embargo, se ha identificado como conclusión en estas investigaciones, que hay un temor grande por cuanto este segmento de comercio es muy apegado al efectivo y les falta mucha confianza por el dinero electrónico, toda vez que tienen temor a la regulación que puede llegar a sus negocios por la bancarización, los cobros adicionales y el acceso al internet. Este indudablemente será un trabajo largo, dispendioso y tedioso, dado que la mayoría de los negocios de tiendas y que han sido por tradición de generaciones, se maneja mucha informalidad, hay temor a mayores impuestos, hay resistencia a modificar sus negocios, falta de proyección, de educación y les costará mucho el adaptarse a nuevos procesos tecnológicos para modernizarse a partir de nuevos métodos.
Esperamos que los tenderos puedan asumir estos cambios que nos impulsó la pandemia y que, así como a muchos nos tocó adaptarnos a nuevos esquemas, ellos lo hagan para ir en la evolución tecnológica, para con ello también ayudar a minimizar riesgos en la salud tras evitar el contacto por el dinero. Lo cierto es que con esta implementación se evoluciona, pues ya hay una gran revolución con la implementación de los códigos QR, monederos de Nequi y Daviplata que facilitan la vida al consumidor. Hay que eliminar las barreras del atraso, lograr una buena conectividad y con ello educarnos financieramente.