Sin embargo, logró contra los pronósticos, superar las cifras en rojo y convertirse en una de las mejores en el transporte de pasajeros, público y de encomiendas, apostándole además a la operación aérea como una de las metas a mediano plazo.
Armando Cuéllar Arteaga ha sido 17 de los 55 años gerente de la empresa. Gracias a un arduo trabajo ha logrado consolidarla como una de las más importantes organizaciones de transporte en el país.
LA NACIÓN dialogó con él en el marco de la celebración de la empresa, la cual festejará su aniversario el próximo jueves 14 de abril en el Centro de Convenciones ‘José Eustasio Rivera’ en Neiva.
¿Cómo ha sido estar al frente de esta importante empresa?
Yo he estado vinculado a Coomotor desde los años 80 y me inicié como conductor. Llegué hace 17 años como gerente liquidador, pero contra todo pronóstico nos propusimos sacar adelante esta empresa y es lo que día a día venimos haciendo, fortaleciendo y consolidando nuestro trabajo.
¿Cómo fue este proceso?
En 1990 había un patrimonio económico negativo de $750 millones, es decir que el trabajo de los 38 años atrás se había perdido pero no queríamos dar por hecho esto. Todo nos indicaba que la salida era la liquidación, pero por el nombre y lo que generaba la empresa para la región empezamos a desarrollar acciones encaminadas a recuperar la cartera mediante la prestación del mejor servicio de transporte.
¿Cuál es la situación actual de la empresa?
A diciembre 31 de 2015 nuestro patrimonio es de $26.644 millones. Hemos tenido un crecimiento continuo, ese siempre ha sido nuestro objetivo y lo hemos hecho.
¿A qué se debe este crecimiento?
Considero que fue a que nacionalizamos nuestra operación, desde su constitución esta empresa no se limitó a la región. Pensó en crecer. Además nuestros clientes no nos abandonaron. Fue un trabajo en conjunto entre proveedores, asociados y colaboradores sacar adelante esta organización y seguir generando empleo.
¿Actualmente cuantos empleos se generan con esta empresa?
Nosotros no lo medimos por personas, somos una familia y lo medimos como tal. En total 1.500 familias vivimos de esta organización en los 12 departamentos donde ejercemos operación.
¿Cómo se ha mantenido el crecimiento con respecto a la competencia?
Es muy duro, principalmente en servicio intermunicipal. Pero hemos visto que las empresas compiten con los precios, haciéndolas menos rentables y sólidas. Nosotros competimos con calidad e innovación, lo que nos da un valor agregado y que vemos reflejado en la preferencia por nuestro servicio.
¿Qué se tiene preparado para estos 55 años?
Seguir creciendo. Esa es nuestra consigna. Mediante el uso de las tecnologías principalmente. Como por ejemplo la venta de los tiquetes por internet, trayendo los últimos avances en materia de comodidad y operación para nuestros buses. Tenemos además inversiones para la construcción de 15 terminales en diferentes departamentos.
¿Y frente al servicio intermunicipal y urbano?
Son puntos altamente competitivos pero le apostamos a la diferenciación y calidad del servicio. En el sistema urbano esperamos que las autoridades brinden seguridad y soluciones frente a la ilegalidad como el mototaxismo y el taxi colectivo. Esperamos desde hace 10 años que el Sistema Estratégico de Transporte Público (Setp) se haga una realidad, ojalá se cumpla con esta nueva administración.
Uno de los retos más importantes es el posconflicto y el turismo. ¿Qué opinión le merece?
No conozco un transportador que sea amante de la guerra, somos amantes de la paz. El sector ha sido blanco de la violencia desde un inicio y creo que con la firma y la construcción de la paz podemos generar un mayor crecimiento a nuestra región y nuestro país. Apoyamos todos estos procesos.
Con todo este panorama, ¿Cuánto espera crecer en el 2016?
Le apostamos a la movilización de dos millones de pasajeros. Hacer parte del Sistema Estratégico de Transporte, para lo cual ya estamos renovando nuestra flota urbana, y definitivamente hacer nuestros primeros pinos en mercado aéreo.
“La región y el país le apostó a Coomotor, y no se equivocó”, Armando Cuellar.