Alejandro Serna
Si bien la gente está pendiente de las próximas elecciones presidenciales y sobre las Festividad del Bambuco, hay un tema que convoca dada la reciente sanción de la ley del entrenador deportivo, toda vez que, generará cambios en la prestación del servicio integral de entrenamiento deportivo y que impactará la vida laboral de un número importante de ciudadanos y de los programas deportivos en sus diversos niveles de aprendizaje.
El pasado 23 de mayo el Congreso de la República se sancionó la Ley 2210 que reconoce y reglamenta la actividad del entrenador deportivo en las diferentes modalidades y servicios posibles en el territorio nacional, desde los niveles formativos, aficionados, profesionales y hasta el alto rendimiento. Cuando hablamos del oficio del entrenador o monitor deportivo en Neiva, debemos entender que trastoca varios los campos de acción donde se desempeñan estas labores y diversos programas en el sector educativo escolar y universitario, el sector comunal a nivel de gimnasios, escuelas y academias deportivas de carácter privado y público y en el sector del deporte asociado a nivel de los clubes deportivos y las ligas deportivas del departamento del Huila, que en su mayoría, tiene sede principal en la capital.
En Neiva existen más de 800 programas de deporte representados por la oferta de las escuelas deportivas, los clubes, los gimnasios y las ligas del departamento, donde se ejerce el oficio del entrenador, encontrando una cifra cercana a los 1500 profesores y profesoras, que actualmente ofrecen los servicios en los diferentes programas, dentro de los cuales tenemos una población que ejerce la actividad bajo la titulación académica profesional, tecnológica o técnica y otra arte de la población ejerce de manera empírica. Estas rugosidades de la norma conllevan a que todos los entrenadores deportivos deban solicitar una tarjeta profesional, con lo cual se advierte una situación compleja para la población de entrenadores que ejercen su actividad sin titulación alguna, ya que podrían caer en la ilegalidad del servicio prestado, acarreando restricciones y sanciones personales en las posibilidades del ejercicio de su actividad.
Esta ley establece un periodo transitorio de tres años para exigir la adquisición de la tarjeta profesional definitiva o temporal, lo que se va a generar un cambio importante en los procesos de oferta del servicio, contratación pública y privada y la reorganización del mercado deportivo, teniendo un impacto territorial, donde los actores políticos y públicos como el Director del Inder departamental, la Secretaría de Deporte municipal y la Jefatura del Programa de Educación Física de la Universidad Surcolombiana, los cuales deberán anticipar las acciones pertinentes afrontar esos nuevos retos.
Este sábado 18 de junio en el Concejo de Neiva realizare el “Primer conversatorio sobre los impactos de la Ley del entrenador deportivo”, en donde tendremos como invitados al doctor Néstor Ordoñez, coautor de la nueva ley del entrenador deportivo y al experto Diego Herrera referente neivano de los entrenadores de alto rendimiento en el Huila.