En su primer año como diputado el joven político Sergio Younes asumió el reto de la presidencia de la Asamblea del Huila En su primer año como diputado el joven político Sergio Younes asumió el reto de la presidencia de la Asamblea del Huila y la entregó el pasado viernes bajo un buen balance de gestión según lo expresó en entrevista con LA NACIÓN. LA NACIÓN. NEIVA El viernes anterior el diputado Sergio Younes entregó la presidencia de la Asamblea del Huila en donde anunció los diferentes logros alcanzados por la duma en este primero de 
cuatro en coadministración con la Administración Departamental que preside Cielo González Villa. El joven dirigente al que el nuevo presidente de la entidad; Carlos Alirio Esquivel postuló a la Cámara de Representantes en las próximos elecciones se confesó con LA NACIÓN sobre sus aciertos y desaciertos al frente de la corporación. Terminó su presidencia en la Asamblea del Huila. ¿Qué balance le deja dicha responsabilidad? Inicio por una afirmación comprobable por estadísticas, que no permiten engañar a nadie: somos en estos once meses la Asamblea más propositiva que ha tenido el Departamento del Huila en su historia. En este año los Diputados presentamos más iniciativas que las que se presentaron en Asamblea alguna en estos 101 años de historia que nos ha antecedido como Corporación. Pero además, esas iniciativas, como los debates de control político, prácticamente coparon la agenda política y social de este departamento. La Asamblea recuperó su lugar como primera Corporación Pública en el orden regional. Por ejemplo, por primera vez en la Historia del Huila, se celebró en nuestro departamento una Audiencia Pública de la Comisión de Derechos Humanos del Senado de la República. Implementamos, a través de un convenio suscrito con la Esap, el sistema de calidad Mecci, que nos permitirá el uso y apropiación de nuevos modelos de gestión, introducción de las mejores prácticas y control en la Administración Pública, con lo cual se incrementará nuestra efectividad y se cumplirá, de esta manera, con los fines esenciales que nos fueron definidos en la Constitución, la Ley y el Reglamento. ¿Qué viene en su inmediato futuro político?, se dice que saltará a la Cámara de Representantes o que será candidato a la Alcaldía de Neiva. Deseo estar donde pueda serle más útil al departamento y a la comunidad. No se trata de en qué cargo podré lucir más sino en qué escenario podré servir mejor. Ese es y será el escenario deseable para mí. ¿Cómo califica sus relaciones con la gobernadora Cielo González este año? ¿Se sintió amado, correspondido u odiado? Las relaciones fueron respetuosas y cordiales. Tanto ella como yo hemos estado, estamos y estaremos al servicio del departamento. Su relación con el senador Géchem es muy estrecha, ¿se seguirá afianzando esa llave política? Por supuesto que sí. Admiro y aprecio al Senador Jorge Eduardo Géchem, le tributo gratitud y le debo solidaridad. Lo acompañé y lo seguiré acompañando. Me siento honrado en pertenecer a su causa política y ser su amigo personal. Y destaco algo de él: su figura es un referente constante de la actividad política y del servicio comunitario. Por sus dotes de caballerosidad, su solidaridad, su grata lealtad y su vocación de servicio es un líder acatado y admirado por todos. Él es una de las figuras políticas más importantes del Huila y del Surcolombiano. ¿Qué le dicen a usted los nombres de Julio César Triana y Héctor Javier Osorio, en el terreno político? Son dos figuras políticas, experimentadas, que tienen mucho que ofrecer a la región y al país. ¿Usted jugó a la caída de la gobernadora o cómo se movió en esos ambientes? No he jugado a la caída de nadie, mucho menos a la de la gobernadora. Mi anhelo ha sido, es y será el de que la gobernadora sea exitosa en su propósito de gobierno para bien de los intereses comunitarios y del futuro mismo del departamento. Aun cuando no faltarán quienes procuren hacer entender algo diferente, que le apuesten por fuera del gobierno, o incluso en él, al enrarecimiento de las relaciones entre la Gobernadora y yo. Eso básicamente se deriva de malsanas aspiraciones electorales o vacíos anhelos económicos. Le aseguro que el pueblo huilense, más temprano que tarde, se encargará de devolverles atenciones y enjuiciar esa mezquina conducta. Usted dice ser del Partido de la U, pero muchos aseguran que esa U, su U, está muy ligada al Partido Liberal, ¿cómo es esa mixtura? Más que por divisas o ganancias electorales de ocasión mi actividad política se soporta en principios, en todo lo que tenga que ver con el estimulo y defensa de los intereses de la región y del país. Y en eso el partido Liberal, como los demás partidos y movimientos políticos, es necesario, conveniente, oportuno e indispensable. Si queremos lograr el pleno desarrollo económico y social para nuestro departamento, tenemos que apostarle a construir unidad entre nosotros. Las diferencias de campaña no pueden persistir en época de gobierno ni mucho menos trascender. Que nadie olvide la enseñanza del doctor Guillermo Plazas: “del Patá para arriba todos somos Huila”. Tuvo sus tropiezos varios como entregar dividida la asamblea. ¿Qué opina de eso? Que tengo el honor de poder afirmar que mi nombre nunca fue piedra de discordia en el actuar de la Corporación. Por el contrario, siempre promoví, privilegié y defendí, como lo hago y lo seguiré haciendo, los intereses del departamento a través de una acción permanente y coordinada de la duma. En las próximas elecciones a la gobernación, a quién ve en el paisaje político. A Carlos Mauricio Iriarte o a Jorge Fernando Perdomo. Son ambas opciones políticas respetables y calificadas. Serán los hechos los que nos irán diciendo cuál de las dos estará en el escenario político, cuál es la más atractiva y cuál será la más conveniente para la comunidad. ¿La política de hoy es con jóvenes o con ‘históricos’? La política de hoy como la de siempre es con todos y para todos. Sin exclusiones. Le recuerdo que en el propósito de servir a todos cada cual es indispensable. Una anécdota en su primiparada como presidente y como diputado. No recuerdo una de ellas en este momento. Pero le digo algo: en la vida, sobre todo en la actividad política, día a día se tienen nuevas experiencias. En la actividad pública unas veces se acierta y en otras ocasiones los hechos no son interpretados adecuadamente. Pero cualquiera que sea la situación planteada siempre debe procurársele la respuesta oportuna y de todas maneras inspirada en la buena fe. ¿Qué cosas amargas le dejó el paso por la presidencia? Ninguna. Agradezco a Dios, a mi familia y al pueblo huilense la oportunidad que me otorgaron. Todo fueron enseñanzas que tienen validez para el presente, el corto y el largo plazo. Es propio de la vida política enfrentar dificultades. El secreto del éxito está en saberlas interpretar y manejar para que sus probables resultados sean los más convenientes. ¿Quién es su mentor político y por qué lo destaca? Tengo la fortuna de contar con varios de ellos. Pero entre todos siempre destaco a quien ha sido el principal soporte en los más difíciles momentos, el doctor Guillermo Plazas Alcid. A quien agradezco y agradeceré siempre la oportuna amistad, la guía permanente, el sobresaliente ejemplo, el indeclinable soporte, el buen consejo y la enseñanza determinante. De él aprendí hace ya varios años la consideración cierta de lo que es y debe ser la persona como valor primario, de lo que debe ser el individuo, el ser humano, en una sociedad que lamentablemente vive y subsiste sin compromiso por sus semejantes. ¿Por qué se metió a la política si dicen que era buen estudiante? Porque me apasiona servir a los demás. “Dotamos a la Asamblea de una imagen propia que aún no tenía, como también lo hicimos de una página de internet a la altura de las que tiene cualquier entidad del orden nacional. Iniciamos un proceso de fortalecimiento institucional que se traduce en fortalecimiento a la democracia de nuestra región y conseguimos, como consecuencia de ello, que Goberna-América Latina y la Fundación Ortega y Gasset”.
