Se está acercando el departamento del Huila rápidamente a la cifra de los mil muertos como consecuencia de la pandemia, que llegó al país a principios de marzo pasado.
No se trata de un dato para mirar de soslayo o para restarle importancia. Se trata de una cifra que representa, ante todo, dolor. Son cerca de mil vidas que se han apagado este año por cuenta de una enfermedad que nos ha sorprendido a todos. Se trata de seres humanos, personas con sueños e ilusiones, hombres y mujeres de experiencia, abuelos, padres, hermanos, tíos, amigos, cuya partida representa una enorme pérdida. A todos ellos nuestro tributo siempre.
Los casi mil fallecidos por cuenta del coronavirus en esta región del país es además la muestra de un virus que sigue representando una gran amenaza para la vida e integridad de los huilenses nueve meses después de haberse reportado el primer caso de la enfermedad.
La dolorosa cifra también debe ser mirada en un contexto nacional e internacional. A estas alturas, el país ya registra más de 37 mil 100 muertos, y a nivel mundial, los fallecidos suman 1,5 millones. Cifras realmente escandalosas y angustiantes.
Con la cercanía de las fiestas de Navidad y fin de año, muchos parecieran olvidar la enfermedad, algo que puede resultar lamentable en el futuro. Por eso, desde esta tribuna, estamos insistiendo en que estas festividades sean asumidas con mucha prudencia, a que no se olviden medidas como el distanciamiento social o el uso permanente del tapabocas. Y lo más importante: si resulta contagiado, haga el aislamiento por 14 días junto a su familia para romper la cadena de transmisión del virus.
De todos dependerá básicamente que estas impactantes y desgarradoras cifras de muertos no sigan creciendo.
“A estas alturas, el país ya registra más de 37 mil 100 muertos, y a nivel mundial, los fallecidos suman 1,5 millones. Cifras realmente escandalosas y angustiantes”