La adolescente paquistaní, galardonada ayer a los 17 años con el Premio Nobel de la Paz, es una defensora del derecho a la educación de las mujeres propulsada a tras sobrevivir milagrosamente a un atentado de los talibanes.
Hace casi exactamente dos años, el 9 de octubre de 2012, varios islamistas irrumpieron en el autobús escolar en el que volvía a su casa después de las clases en Mingora (en el valle de Swat) y uno de ellos preguntó: ¿Quién es Malala?. Luego le disparó un balazo a quemarropa en la cabeza.