La Nación
Plebiscito contundente 1 12 mayo, 2024
COLUMNISTAS OPINIÓN

Plebiscito contundente

Surtida las elecciones del domingo anterior, cesó la horrible noche. Un nuevo panorama político que le habla al presidente de forma clara y fuerte. Nuevo pesos y contrapesos que oxigena en las regiones, y de paso, al legislativo. Los efectos, se sintieron hasta en la alocución presidencial al cierre de la jornada electoral, pues la misma fue prudente. Cómo siempre ha debido ser. De Unidad nacional. No más discursos con espejo retrovisor. No más confrontaciones ni tensiones con diferentes actores. No más ideas de choque con la opinión pública en general.

Estas elecciones constituyeron una especie de aprobación o no (termómetro) a la gestión y a todos los hechos y planteamientos del gobierno liderados por el presidente Petro en este año largo de gobierno. Incluso, es una manifestación frente a su impopularidad. O dicho, en otros términos, una resistencia que se advirtió, no en marchas, ni paros, ni protestas, ni manifestaciones, sino directamente en las urnas. Por su puesto, ello tiene un sentido o mirada diferente. Definitivamente, que lo aprobado en el Plan Nacional de Desarrollo se ejecute (que gobierne).

En ese sentido, el presidente le corresponde honrar su palabra en cuanto a reunirse con los nuevos mandatarios locales en un ambiente de sana cordialidad para articular los planes de desarrollo con los planes del cambio y el deber como gobernante de acatar y respetar la voz del pueblo, como lo planteara en su alocución. Si ello se cumple, se estaría dando paso a lo que Enrique Dussel planteara en sus 20 tesis de política para lograr una civilización trans-moderna, y por ello, transcapitalista, más allá del liberalismo y del socialismo real. Es decir, en el que se privilegie por encima de todo en esta época, la creatividad para darle paso a los excluidos, originarios y pueblos.

En este sentido, donde la política sea utilizada en cada momento como especie de un oído de discípulo, para que los que mandan, manden obedeciendo.  Hasta el momento, esto no se ha presentado a cabalidad. Más bien ha sido un año de múltiples tensiones con la anuencia del presidente, que no deben continuar. Ese llamado a diálogo nacional, ambiente de cordialidad y búsqueda de consensos, ameritan que sea la línea para seguir, en estos años de gobierno nacional que aún quedan del presente periodo presidencial. Los liderazgos que surgieron y se renovaron o reencaucharon en la región tienen la enorme responsabilidad de no defraudar en la solución del descontento del pueblo frente a esa interlocución debida con la institucionalidad con relación a los diferentes problemas que los aqueja. Indiscutiblemente, un ambiente de tranquilidad se respira una vez surtida estas elecciones para el bien de la mayoría del pueblo colombiano.

Es la oportunidad del presidente Petro, de reencontrar el faro de acuerdo con los postulados de las 20 tesis de Dussel, a fin de seguir timoneando este importante barco llamado Colombia. Plebiscito concretado.