La reforma pensional que hace curso en el Congreso de la República y que fue aprobada en segundo debate en el Senado, representa un paso fundamental hacia la equidad y el bienestar de los colombianos, especialmente de los que más lo necesitan. Es una iniciativa que, lamentablemente, ha sido malinterpretada, tergiversada y hasta satanizada por algunos que, con intereses claros, buscan desacreditar los esfuerzos del gobierno del presidente Gustavo Petro.
Es importante resaltar que esta reforma contempla problemáticas estructurales que han sido ignoradas por los tres o cuatro presidentes anteriores, a pesar de su evidente urgencia. Ahora, bajo el liderazgo del presidente Gustavo Petro, se están tomando medidas necesarias para garantizar un sistema pensional más justo y sostenible para todos los colombianos.
Una de las principales bondades de esta reforma es su enfoque social para favorecer a los más necesitados. Se propone ampliar la renta vitalicia para aquellos que no han cotizado lo suficiente, así como definir un subsidio para personas en situación de pobreza extrema y vulnerabilidad. Esto significa que aquellos que han dedicado años de trabajo duro pero no han podido acumular suficientes recursos para su jubilación, recibirán el apoyo necesario del Estado para garantizarles una vejez digna.
Además, la reforma busca mantener la edad de jubilación en 57 años para las mujeres y 62 para los hombres, lo cual es fundamental para proteger los derechos de los trabajadores. También contempla la inclusión de semanas de cotización por hijos, (hasta tres) reconociendo el invaluable trabajo de las mujeres en la crianza y el cuidado de sus familias.
Resulta pertinente mencionar que esta reforma no solo beneficia a los trabajadores actuales, sino que también establece un marco sólido para el futuro. Se prevé la creación de un comité de expertos que revisará periódicamente el sistema pensional, asegurando su adaptabilidad a los cambios demográficos y económicos a lo largo del tiempo.
Se trata de una reforma necesaria y bien intencionada, con innegables beneficios, que infortunadamente ha enfrentado la feroz oposición por parte de sectores políticos y mediáticos que claramente buscan desestabilizar al gobierno actual para regresar al poder. Por esto es importante que la ciudadanía se informe adecuadamente sobre los detalles y las implicaciones de esta reforma, en lugar de someterse a la desinformación y la manipulación.
Los colombianos debemos apoyar y estar tranquilos con esta reforma pensional que garantizará el bienestar de todos los colombianos en su etapa de retiro, proyecto que deberá surtir, antes del 20 de junio, dos debates más en la Cámara de Representantes, antes de convertirse en Ley de la República.