La Nación
Salvaguardemos La Tatacoa 1 12 mayo, 2024
COLUMNISTAS OPINIÓN

Salvaguardemos La Tatacoa

 

María Consuelo Plazas Serrato

El pasado 12 de octubre el Desierto de la Tatacoa, patrimonio natural del Huila, fue escenario de la tercera versión del Festival Tatacoa 2019, actividad que impulsa la música electrónica con invitados de talla nacional e internacional para que los asistentes vivan y se deleiten de una mágica experiencia bajo las estrellas.

Hasta ahí todo estaría bien sino fuera porque la culminación del festival estuvo precedida por el deceso de un joven universitario de tan solo 19 años de edad, hecho que fuera divulgado por diversos medios de comunicación. Sobre el particular la FM en diálogo con el comandante de Policía Huila refiere que “se delegó un grupo especial para tratar de establecer la causa de la muerte del joven universitario quien presentó convulsiones antes de ser trasladado al Hospital del Perpetuo Socorro de Villavieja, donde infortunadamente falleció, producto de un paro cardiorespiratorio”. Seguidamente advierte que “frente a toda la sintomatología que presentó este joven antes de fallecer y de acuerdo a lo manifestado por los médicos que preliminarmente lo atendieron, fue un paro cardiorespiratorio, probablemente producido por una posible sobredosis de consumo de estupefacientes”.

Aunado a tan lamentable hecho la realización del concierto viene generando gran polémica por el  impacto ambiental que ocasiona en el ecosistema, tal y como lo aseguró en algunos medios de comunicación Carole Macchi, directora ejecutiva de Cotelco Huila al afirmar que aunque dicha actividad dinamiza el sector del turismo, no se cuenta con el control necesario, pues lo que claramente se  evidencia “es la destrucción, es el daño ambiental, es el desorden, el mugre que dejaron y definitivamente esa es una de las tareas acuciosas a la que estamos invitando como miembros de la Mesa Sectorial de Turismo  para que se haga juiciosamente un estudio de capacidad de carga del desierto”.

Solo resta esperar que las autoridades competentes de manera articulada emprendan acciones de prevención eficaces tendientes a gestionar de manera efectiva los riesgos a los que se hallan expuestos esas dos grandes riquezas: Por un lado la juventud, el gran tesoro de la humanidad y por el otro la Tatacoa, nuestra gran maravilla ecológica.