Froilán Casas Ortiz
Obispo de Neiva
Ser positivo no es estar feliz todo el tiempo, es entender que a pesar de los días difíciles, vendrán mejores. ¿Quién no tiene problemas en esta vida? Excúsame decirte, si tú no quieres tener problemas, por favor muérete; por eso se le dice a la muerte: descanso eterno. La vida está llena de altibajos; no todo es camino llano. Con frecuencia uno mismo es el creador del problema, por eso uno mismo debe buscar la solución. Si lloras porque se ha ocultado el sol, las lágrimas no te dejan ver las estrellas. ¿Por qué vives echando la culpa a los demás por los problemas que padeces? Perdóname, tú eres el problema, luego tú eres la solución. Hay gente insoportable, ¡qué tristeza, tener que aguantarla! A esos especímenes hay que tratarlos con beneficio de inventario. ¡Cuidado! No pelees con el que nada tiene que perder, mañana te puede llevar a la tumba o una muerte en vida. Huye de la persona tóxica, en toda parte envenena el ambiente. Es el prototipo del resentido social, expele cianuro por donde pasa. El resentido es el que no ha sabido luchar y ha estado de derrota en derrota; su incapacidad la expresa con rabia hacia los demás, sobre todo frente a aquellos que han triunfado. Hay gente tan venenosa y envidiosa que necesita sacar un poco de veneno en los chismes para no morir envenenada. Huye de la gente disociadora, son un fastidio para el espíritu. Se vuelven monotemáticos en sus conversaciones y enrarecen el ambiente. Rodeémonos de gente luchadora y echada para adelante, de gente que al problema le ve la solución. Si quieres volar alto, júntate con águilas y volarás; no te juntes con serpientes porque te arrastrarán. Esa gente cargada de CO son portadoras de fracasos; nunca están contentas con nada; son las personas menos colaboradoras, no mueven un dedo para salir del atolladero. Rodéate de gente positiva, batalladora y luchadora. No te juntes con quien vive hablando mal de los otros, mañana ese tal hablará peor de ti. Ten cuidado con las personas que viven ofreciéndote lisonjas cuando estás en el poder, mañana te pisotearán cuando lo pierdas. Recuerda que el poder político, económico, físico, social, académico y religioso es de lo más efímero del mundo. Por favor no olvida saludar cuando subas no sea que te avergüences cuando bajes. La vida es una lucha permanente, asúmela y transfórmala. No te preocupes tanto por el futuro, vive con intensidad el presente. El futuro depende de la manera como vives hoy. Cuida tu salud en la juventud para que la vejez no sea un pozo de amargura. Hay dos cosas que debes mantener en privado: tus ingresos y tu próximo proyecto. Rodéate de gente positiva para que sean coequiperos en el largo viaje de tu vida.