Jorge Luis Salcedo Restrepo
Con esta pandemia del covid-19 a nivel mundial y nacional se vienen promoviendo una serie de recomendaciones que en su mayoría son buenas pero que abusando de ellas podríamos complicar a la larga más la situación.
El tapabocas como preventivo es bueno, siempre y cuando sea de un material adecuado y se use como debe ser. Hay varios materiales y referencias, entre ellos el N-95 que es adecuado para el uso hospitalario o en consulta de emergencias (estrictamente para el personal de salud y funerarias). Hay otros que son para uso ambulatorio en la calle o en público sobre todo en zonas en donde se transporta la gente como buses de transporte masivo o metro. Existe otro tipo de tapabocas que no es muy recomendable por la sencilla razón de que los virus y las bacterias pasan fácilmente de un lado a otro. Es fácil probar su permeabilidad tratando de apagar una llama con el tapabocas puesto (si se apaga no es recomendable).
El tapabocas debe usarse no en el cuello, sino tapando nariz y boca. No se debe usar dentro de la casa, tampoco se debe utilizar para hacer deporte, ni para conducir, en este último caso es demasiado peligroso pues como ustedes lo saben el aire que exhalamos es rico en CO2 y al inhalarse no lleva el oxígeno, inhalado del aire normalmente, sino el CO2 que exhalamos, produciendo por ende un trastorno en la oxigenación de nuestros tejidos, en especial de nuestro cerebro que si estamos manejando un auto vamos a dormirnos fácilmente, o, vamos a perder el conocimiento y en algunos casos se podrán producir convulsiones del sistema nervioso por hiperventilación u otros trastornos. Generalmente como ustedes habrán experimentado la persona se cansa rápido con el tapabocas puesto mientras se está caminando, a mayor velocidad.
Si abusamos del uso del tapabocas el negocio también será bueno para los otorrinolaringólogos, pues se facilitará la producción de rinitis, sinusitis y faringitis, por el recalentamiento del aire circulante y aumento de la humedad.
Ahora con respecto al uso de guantes, creo yo, que solo deben usarse en hospitales y centros de emergencia entre paciente y paciente, pero en la calle usar guantes de material cauchoso lo único que hace es atrapar virus y bacterias para repartirlas aún más, produciendo una sensación de confianza errónea. El lavado de manos adecuado no lo remplaza nada, y el uso de geles alcoholados colabora, pero yo les aconsejo que en la noche utilicen en sus manos un humectante en base a urea para reponer tanta exposición a disolventes grasos por el jabón.
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