Neiva fue epicentro la semana pasada de la jornada ‘Buen Gobierno en las Regiones’, donde tuvimos la oportunidad de asistir a la conferencia ‘Alianzas Público-Privadas, un imperativo para el desarrollo sostenible de las regiones’, que envió un mensaje claro a los gobernantes sobre la importancia de la buena gestión, el trabajo articulado, armónico, para obtener los mejores resultados entre los mencionados sectores en busca del impulso de proyectos de desarrollo regional que nos permitan construir un Huila pleno de esperanza y progreso.
De nuestra parte, estamos proponiendo un programa de equidad, con énfasis en los asuntos sociales, el emprendimiento, la innovación, las oportunidades y la seguridad, sin descuidar las grandes obras que transformen hacia el futuro el departamento. Es decir, la construcción y siembra de un mejor futuro para todos los huilenses, con la participación de todos, sin excepciones. Esta política parte de la convicción de que urge una gran fuerza dinamizadora de la sociedad y las comunidades, que minimice las necesidades y las diferencias de clases.
Sabemos que la transformación productiva y la solución de problemas requieren un gran programa de gobierno, que actúe desde una perspectiva ética, política, social y económicamente pertinentes. En eso estamos ‘trabajando con esperanza’, en los grandes temas que consideramos cruciales para la gente. Sobre objetivos que hagan posible emprender acciones muy puntuales, en la urgente necesidad de conseguir un desarrollo social sostenido, mediante la reducción de la pobreza, la desigualdad, la índices de violencia, entre otros.
Esas son nuestras preocupaciones, que además hacen parte de un compromiso hecho por el Huila y sus habitantes: acelerar el crecimiento económico, el aumento de la productividad y la competitividad, y disminuir la inequidad, elementos que, pronto, permitan que todos los huilenses tengan acceso a la educación, a los servicios de calidad; a una seguridad social equitativa y solidaria; al mercado laboral (promoviendo la formalización o apoyando el emprendimiento); a mecanismos de promoción social efectivos;
a la equidad de género y la autonomía de la mujer; a reducir la mortalidad infantil; a garantizar la sostenibilidad ambiental…en fin,
a fomentar una alianza regional para generar progreso, desarrollo y esperanza para todos los huilenses.
Se trata de metas concretas, medidas a través de indicadores juiciosos, capaces de valorar, sin ambigüedades, los avances y retrocesos en los distintos órdenes, regional o local, del modelo socio económico que estamos construyendo para nuestro amado Huila.