La Nación
Adaptación a la jubilación 1 11 mayo, 2024
COLUMNISTAS OPINIÓN

Adaptación a la jubilación

A propósito del texto de reforma laboral que cursa en el Congreso que, si bien aborda una amplia gama de temas dirigidos al bienestar y productividad de los trabajadores, a juzgar por lo analizado, se dejó de lado un tema de transcendental importancia relacionado con el componente de preparación dirigido al activo más preciado de las organizaciones: los trabajadores cercanos a la edad de jubilación.

Es bien sabido que el retiro de la vida laboral trae consigo cambios significativos a nivel social, familiar y económico que repercuten de manera relevante en los diversos contextos y ello hace que requiera de una debida preparación, en la búsqueda por minimizar los impactos negativos que eventualmente pudiesen suscitar en términos de ajuste y adaptación, habida cuenta que, en la mayoría de las veces «la sociedad prepara al individuo para la etapa de producción, pero ha descuidado la preparación para la etapa de jubilación».

Cabe recordar que una jubilación mal asimilada podría llegar a convertirse en predictor negativo para la salud mental de las personas, dado los efectos colaterales que trae aparejados, asociados a altos niveles de malestar emocional. Por consiguiente, humanizar tan importante fase vital, se constituye en piedra angular a la hora de gestionar estrategias y herramientas que posibiliten la adaptación positiva y satisfactoria de los trabajadores que transitan por una etapa que, sin duda, modifica a todas luces su cotidianidad.

Estudios recientes ponen de manifiesto la importancia de que las empresas faciliten el acoplamiento en los diferentes ámbitos «por medio de conferencias, consultas individuales y grupales donde compartan experiencias que los ayude a ampliar su visión sobre la situación, prepararlos para darles mayor seguridad y confianza orientándolos y ubicándolos en lo que podría ser su vida en un futuro».

Al margen de lo expresado, resulta imperativo que las empresas pongan en marcha iniciativas que faciliten el afianzamiento del proyecto de vida al momento de la jubilación, creando conciencia de la situación futura y contribuyendo a la reducción del impacto negativo, pilar fundamental a la hora de asegurar el bienestar integral en términos de calidad de vida. Infortunadamente son escasas las organizaciones que incluyen dicho componente dentro de sus programas de bienestar o responsabilidad social, olvidando que como lo afirmara la escritora Catherine Pulsifer: «la jubilación puede ser un final, un cierre, pero también un nuevo comienzo».