Emgesa comenzó ayer el proceso de recuperación de predios ubicados en la zona de utilidad pública que concedió el Gobierno Nacional para el proyecto hidroeléctrico El Quimbo y que habían sido ocupados por personas de la región.
El primer predio en donde se cumplió esta actividad fue La Vega, entre Majo y Jagualito, conformado por 140 hectáreas. En la diligencia de desalojo intervinieron: el inspector de la Policía de Garzón, Heriberto Rivera; la personera Sandra Natalia Fajardo, la secretaria General y de Convivencia, Yina Paola Lombana, y la Policía, entre otros organismos que hicieron el acompañamiento respectivo.
El predio estaba desocupado, pero lo que hicieron fue entrar con maquinaria pesada y destruir casas de habitación y todos los bienes del lugar, para evitar que se vuelvan a presentar invasiones como las que tuvieron que encarar a finales del año anterior y que terminó en algunos casos en enfrentamientos de los ocupantes contra la Fuerza Pública.
“Aquí se está actuando en concordancia con las normas para garantizar la recuperación de los terrenos bajo el amparo policivo, para acceder a los derechos que brinda la utilidad pública que hay que contemplar”, dijo uno de los funcionarios de Emgesa.
Expropiaciones
Para el proceso de expropiación que se comenzará a aplicar dentro de los términos que se han dado, hay por lo menos 60 propietarios con los que no se pudo llegar a acuerdos de negociación y ya desde el momento que se fijaron los edictos emplazatorios corren términos para en cualquier momento hacer efectivos los desalojos en los predios que están involucrados y que llegan a unas 800 hectáreas, correspondientes al 10 por ciento de la totalidad de los terrenos que conforman la zona.
“Estamos vigilando para que todo el proceso que tiene que ver con el manejo de la zona que ha tenido invasión o que no se ha negociado se cumpla con los procesos legales que obligan las normas, pero dentro del respeto y sin violentar a las personas o familias, además que se mantenga la cordura entre los organismos que nos toca estar”, dijo la personera Sandra Natalia Fajardo.
Con maquinaría se procedió a tumbar las casas para evitar nuevas invasiones.