Percibiendo objetivamente nuestra Representación Parlamentaria, más allá de su identificación y competencia partidista, se llega a la conclusión Percibiendo objetivamente nuestra Representación Parlamentaria, más allá de su identificación y competencia partidista, se llega a la conclusión de que está integrada por personas idóneas para el ejercicio que implica su encargo institucional. Sin embargo, sería aconsejable y a la vez conveniente, tanto para sus integrantes como para la misma región surcolombiana, actuar concertada y solidariamente, en los procesos de identificación, evaluación y trámite de asuntos de impacto colectivo. La pluralidad partidista, con todo y lo que ella implica, sea bienvenida. Pero para que rinda sus potenciales frutos, es necesario privilegiar su accionar solidario. Hay temas del orden local y regional, que exigen para su más pronta y eficaz solución, la gestión en equipo de nuestros voceros ante los poderes centrales de la Nación. La Paz: aspiración colectiva.- Día a día, los colombianos verificamos la insensatez de nuestro conflicto interno, que acarrea de por sí, inmenso daño a la Nación. En este trágico escenario, nadie gana, pero pierde en términos absolutos, el Pueblo, que somos todos. Quiera Dios que el 2013 sea el año de la paz. Pero de paz real, objetiva y verificable, construida sobre el diálogo sincero, la justicia social y la participación política. En otros términos, en una paz donde quepamos todos. En la conquista de este noble empeño, cada quien debe contribuir en la medida de sus posibilidades y responsabilidades, empezando por el Estado mismo, obligado a involucrar todos los sectores regionales, sociales y políticos que conforman el país. Desde luego, llegar a ello no es nada fácil. Pero sí necesario. Diríamos más, indispensable, como opción de sosiego general. Relevo en Dirección Ejecutiva.- Probablemente, el 28 de febrero de 2013, se realice –previa convocatoria pública-, la Asamblea General de Pioneros, principal mecanismo estatutario de la Fundación Tierra de Promisión, a fin de evaluar las tareas cumplidas, programar las venideras en el corto y mediano plazo, y elegir el nuevo Secretario Ejecutivo, cargo que, hasta la fecha, vengo ejerciendo desde hace más de 26 años. Así las cosas, de manera respetuosa y cordial, me permito invitar los diferentes sectores sociales a vincularse a este proyecto comunitario, siempre en el entendido que constituye excepcional oportunidad de servir a los sagrados intereses colectivos. Así, pues, las puertas están enteramente abiertas. Sean todos bienvenidos.