La Nación
Propongo un diálogo regional para buscar la paz en el Huila 1 4 mayo, 2024
COLUMNISTAS OPINIÓN

Propongo un diálogo regional para buscar la paz en el Huila

La violencia persistente en el departamento del Huila sigue marcando un desafío constante para la tranquilidad y el desarrollo de nuestro departamento. Los recientes atentados, extorsiones y ahora amenazas a alcaldes, que han sembrado zozobra en nuestras comunidades, son un claro llamado de atención sobre la necesidad de buscar soluciones efectivas, que en mi opinión, no es levantando la tregua para darnos bala.

El tejido social y económico del Huila está seriamente amenazado por estos actos de violencia. Los constantes ataques a establecimientos comerciales y la intimidación a ciudadanos muestran un panorama desolador que impacta no solo en la seguridad, sino también en la estabilidad económica de nuestro territorio. Es urgente actuar con determinación para proteger a la comunidad y garantizar un entorno propicio para la inversión, para la llegada de turistas y en general para el desarrollo.

En este contexto, es alentador ver la iniciativa del gobernador de Nariño, Luis Alfonso Escobar, quien propone el inicio de diálogos regionales como un paso hacia la construcción de la paz. Siguiendo su ejemplo, es hora de que el Huila también levante su voz y busque soluciones concretas para enfrentar esta crisis.

Los diálogos regionales ofrecen una plataforma para el entendimiento y la búsqueda de acuerdos que promuevan la convivencia pacífica. Es un espacio donde las diferencias pueden ser superadas mediante el diálogo y la negociación, en lugar de recurrir a la violencia. Es una oportunidad para construir puentes y encontrar soluciones conjuntas que beneficien a toda la comunidad.

Es importante destacar que el Huila cuenta con una Oficina de Paz, la cual debe desempeñar un papel protagónico en la facilitación de estos diálogos. Es hora de que esta institución demuestre su valía y trabaje en conjunto con las autoridades locales y la sociedad civil para promover un proceso inclusivo y participativo.

Sin embargo, es fundamental entender que el diálogo no implica complacencia con los actores armados ilegales. Es necesario mantener la firmeza del Estado y seguir combatiendo la criminalidad con todas las herramientas disponibles. Pero al mismo tiempo, el diálogo regional puede ofrecer un espacio para explorar soluciones a largo plazo y abordar las causas profundas del conflicto.

Propongo que el Huila se una en un esfuerzo colectivo por la paz. Debemos aprovechar esta oportunidad para construir un futuro más seguro y próspero para nuestras generaciones venideras. No podemos permitir que la violencia continúe robándonos la esperanza y el progreso. Es momento de actuar, es momento de dialogar por la paz del Huila.