Mientras Blanca Gisela Burbano Ortega, vestida como la Virgen María, con una gran sonrisa en su rostro recoge basura del suelo, acomoda sillas y anda de aquí para allá, cientos de turistas concentran su mirada en los animales que hacen parte de la atracción mas importante de San Agustín para la temporada navideña. El pesebre interactivo.
Ovejas, vacas, caballos, bueyes, palomas, tiernos cerditos, burros, conejos y hasta un avestruz, hicieron parte del espectacular montaje que se creó en la capital arqueológica de Colombia y que recreó el tradicional pesebre de Belén, donde se conmemora el nacimiento del niño Jesús.
Sin duda, lo que los agustinianos bautizaron como ‘El Pesebre más Grande del Mundo’ fue un ‘boom’ turístico. Aunque aún no hay cifra oficial, los lugareños hacen cuentas que entre 30.000 y 50.000 personas visitaron el municipio durante los últimos dos meses.
Tanto así fue la afluencia de público, que desde noviembre de 2018 habían personas reservando habitaciones en los hoteles de San Agustín, para fin de año y el puente de reyes, no había una sola cama disponible en el municipio y alrededores. Las tarifas de hospedaje oscilaron entre $60.000 y $80.000, las más asequibles, y de ahí en adelante varía según la ubicación y la comodidad que ofrece cada lugar.
“Yo le pongo que vinieron más de 30 mil personas a ver el ‘Pesebre más Grande del Mundo’ y es la hora que sigue llegando gente, sigue llegando turista por que está abierto hasta el día 18 de enero, estamos acogiendo con el calor de hogar a toda la gente que está llegando de todas partes de Colombia y del mundo”, cuenta Dayro Hoyos, un habitante de San Agustín que ante el panorama hizo lo que varias familias en el municipio, acoger a los turistas en sus hogares.
‘No había para cama para tanta gente’
Con la capacidad hotelera copada, varias familias en San Agustín optaron por poner a disposición de los visitantes sus hogares. Arrendaron habitaciones en sus casas y ayudaron a que los foráneos no terminaran yéndose del municipio por falta de hospedaje.
“Esto es impresionante, teniendo en cuenta que los hoteles en San Agustín no estaban en la capacidad de recibir una masa de público tan grande como la que llegó, no se contaba con esas expectativas, por lo tanto la comunidad los acogió en sus casas, en sus hogares, brindándoles donde se pudieran hospedar con el fin de que el turismo no se nos vaya llevando una mala imagen, teniendo en cuenta que tenemos aquí el pesebre mas grande del mundo”, añadió Dayro.
Esto también representó un ingreso para las familias que en sus cabañas, fincas y casas del sector urbano hospedaron visitantes. Por ese lado también hay que resaltar la hospitalidad de los agustinianos, también su cultura al buscar siempre mantener las calles aseadas, porque de la mano de ofrecer a precios muy cómodos, entre $25.000 y $30.000 el hospedaje y solucionarle la quedada a un turista, también está la buena atención y la orientación que brindan con respecto a los sitios turísticos del municipio, tal y como lo hace don Miller Imbachí y su familia.
Doña Edilma Delgado es la esposa de Miller, trabaja en el Hospital ‘Arsenio Repizo Vanegas’ como auxiliar administrativa y es una digna embajadora de San Agustín, habla de su municipio como si fuera el rincón más bello del mundo, a mi parecer lo es.
“Somos muy privilegiados porque tenemos alrededor mucha naturaleza y la riqueza arqueológica que es única. San Agustín es un municipio muy especial por las riquezas que Dios nos ha dado”, dice doña Edilma.
Asegura que pese a que San Agustín siempre es muy concurrido en varias épocas, como Semana Santa y Navidad, definitivamente la idea del pesebre interactivo desbordó sus expectativas. “Muchísimo porque no solo nos visitó gente de Colombia, sino extranjera, muchos visitantes, hubo mas movimiento de visitantes que en otras épocas, que en otros diciembres”, acotó.
Y agregó que, “por acá en la vereda El Tablón, a pesar de que hay muchos hoteles, porque se han construido muchas residencias y hospedajes, y se habían llenado en su totalidad, entonces los guías recurrieron a nosotros porque teníamos unas habitaciones desocupadas”.
Dijo que lo importante es que los turistas se sientan acogidos y bien atendidos, para que quieran regresar, “de donde sean, siempre hemos tratado al turista como si fuera parte de la familia”.
El pesebre interactivo
Todo el municipio y varias de las más de 90 veredas que tiene San Agustín recrearon el Belén de la época del nacimiento de Jesús, figuras con movimiento del tamaño de un ser humano, animales reales, lugareños vestidos de pastores, además de gran cantidad de luces y decoración navideña que se instaló en el municipio. El pesebre interactivo se puede observar desde que se entra al municipio, todos los parques tienen figuras de gran tamaño, como las del tradicional pesebre que tenemos en casa pero más grandes. Pastores, ovejas, el pozo de los deseos junto a otros atractivos están un punto especifico. Cerca a la Estación de Policía están los tres Reyes Magos con sus imponentes camellos y un gran árbol de Navidad.
En el Parque Principal se concentran los atractivos mas importantes. Empezando por la zona de corrales que da la impresión de estar realmente en la época en que nació Jesucristo, varios animales reales se convirtieron en el centro de atracción, allí grandes y chicos interactúan con los animales que ya acostumbrados, hasta posan para las fotos. Luego de camino a la iglesia hay una zona donde se hayan hermosas figuras de ángeles, pastores y animales. Ya en la iglesia el atractivo es el pesebre que se ubica en el altar.
Pero el recorrido no termina ahí, las casas pintaron y decoraron sus fachadas para adecuarse a la temática. De camino al Estrecho del Magdalena, que son aproximadamente 10 kilómetros desde el casco urbano, las entradas de las fincas se convirtieron en portales como los de Belén y a 5 kilómetros más, después del mirador del Estrecho, está Obando, donde se haya uno de los museos arqueológicos donde reposan algunas estatuas de la cultura Agustiniana.
Por otro lado, el Parque Arqueológico también se convirtió en pesebre al representar la huída de María, José y el niño Jesús, cuando Herodes dio la orden de exterminar a todos los recién nacidos de Belén. Allí también se representaron las pirámides de Egipto, dándole otro valor agregado al atractivo turístico más importante del departamento.
El místico Parque Arqueológico
Quienes fueron a ver el pesebre, no podían dejar de pasar por el Parque Arqueológico de San Agustín donde la magia de su estatuaria se vuelve enigmática y atrayente para los turistas. Más o menos tres horas, se necesitan para recorrer las diferentes estaciones donde se hayan las estatuas talladas en piedra y que datan según estimaciones de los arqueólogos del año 1 y 900 después de Cristo.
Los complejos funerarios, montículos, terrazas, áreas de habitación y de cultivo, dan vestigios de las actividades que realizaba la cultura agustiniana hace más de 2000 años y por donde se busca determinar realmente que fue lo que terminó desapareciendo a sus habitantes.
Los puntos estratégicos del parque se hayan en el bosque de las estatuas; las tres mesitas, donde están la mayoría de tumbas, el Alto del Lavapatas, sitio ceremonial y la cima del Lavapatas, lugar mas alto del parque y que da la sensación de estar en la ‘cima del mundo’.
Realmente, visitar San Agustín pese a algunas deficiencias en la que deben pensar los mandatarios, como el tema de las vías de acceso; entre Pitalito y San Agustín y la que conduce al Estrecho del Magdalena, Obando y otros lugares que integran el anillo turístico del sur, es una experiencia mágica, por sus paisajes y por los enigmas que encierra este territorio opita.
“Hay que conocer Colombia, hay que conocer nuestro patrimonio cultural de la humanidad que es San Agustín, Huila”, reiteran los agustinianos.
Así que si aún no ha visitado San Agustín, aún está a tiempo, pues las atracciones del pesebre estarán hasta el 18 de enero.