La Nación
Una novela a punto de comenzar 1 6 mayo, 2024
COLUMNISTAS OPINIÓN

Una novela a punto de comenzar

 Oscar Alvis Pinzón

 El fútbol es el más generoso de los legados que los ingleses le han dejado a la humanidad. Durante años, muchos intelectuales se resistieron a hablar de fútbol, a pensar el fútbol;  lo consideraban “el opio de los pueblos”. El fútbol es un hecho social fascinante, uno de los grandes inventos del siglo pasado; algo que antes no existía y que pasó de pronto a ser un eje en nuestras vidas. Algo en qué creer, por lo cual apasionarse, una manera de ser a través de otros: un rito religioso; que se celebra cada domingo y cada miércoles y todos los días; pero se festeja sobre todo cada 4 años. El fútbol nos iguala, nos nivela, nos humaniza, nos animaliza, nos diviniza. El fútbol, no solo es un pretexto para medir las fuerzas tácticas o técnicas de equipos y selecciones; sino que también impulsa iniciativas de responsabilidad social. Ya hay ejemplos de lo que puede lograr el fútbol, la sociedad civil, las organizaciones sociales, la empresa privada y un balón; porque contribuyen al desarrollo personal de los niños y jóvenes que viven en situaciones desfavorables. Definitivamente el fútbol da para todo: para aglutinar un pueblo y darle sentido de identidad; para patriotismos y patrioterismos, para la celebración, la pasión, la felicidad colectiva, el sufrimiento y la violencia. El fútbol es un deporte apasionadamente humano y hermoso, sin él y sin la mujer la vida no tiene sentido. En el fútbol el dolor de un gol que no entró, de un penal fallado o de una derrota en el último segundo, puede ser tan desgarrador como una pena de amor. Afortunadamente, siempre habrá un nuevo partido y un nuevo amor.

En el pasado mundial de Rusia 2018 vimos a una Selección con jugadores talentosos, comprometidos y unidos. Jugando bien o regular, Colombia tuvo identidad, nivel y jerarquía. No es gratuito que la eliminación haya sido en los tiros desde el punto penal. Incluso sin nuestra estrella, James Rodríguez, fuimos un buen equipo y hay futuro. No en vano el Mundial sirvió para encontrarnos en las diferencias. Pékerman nos propuso una Selección sustentada en la disciplina, unión y compañerismo. Eso no puede perderse.

La Selección Colombia se convirtió en un factor de unidad nacional. Gracias a la Selección Colombia los niños de este país tienen un ejemplo, los jóvenes un motor y los adultos una ilusión. Ahora solo nos resta continuar con la camiseta amarilla puesta y pensar en la Copa América de Brasil, a partir del 15 de junio. Cabe recordar que el portugués Carlos Queiroz, debutará oficialmente en la Selección Colombia como técnico en los amistosos del 22 y el 26 de marzo ante Japón y Corea. Definitivamente la de Carlos Queiroz, una novela a punto de comenzar. ¡Buen viento y buena mar!