2015 será tiempo relajado, divertido y juguetón (pues es el año del Niño y la Niña) lo insinúan todos los horóscopos, vaticinios y sondeos de opinión. Los cambios se multiplicarán ostensiblemente causando rarezas y sorpresas. Será la regla: Si usted no cambia con el cambio entonces el cambio lo cambiará a usted.
Expertos del Banco Mundial predicen la recuperación de EEUU y países de su órbita, buena época para invertir en bolsas y proyectos locales. En general se reportará estabilidad macro-económica, asunto que favorece la dinámica de mercados financieros, en monedas fuertes como el dólar, el euro, y firmeza en las corrientes de inflación y devaluación. Ojo, no arriesgue su “billete” en pirámides y otros embelecos.
La economía nos forzará al ahorro y la abstinencia quizá porque el modelo económico de “mercados desbordados” empieza su retroceso hacia la mesura y el asistencialismo olvidado en los indicadores del 2014. Verdadero dolor de cabeza de gobernantes y planificadores.
La incomprendida reforma tributaria provocará “ronchones” entre empresarios e inversionistas, sin embargo el empleo se reactivará ofreciendo tranquilidad ante la zozobra que viven muchos compatriotas.
A nivel político, la consolidación de los procesos de Paz continuará atrayendo inversión extranjera y diversidad de negocios, sobre todo los relacionados con energía, minería y sellos verdes.
Inexplicablemente ritmos populares como el reguetón, vallenatos, y norteños, alcanzan los más bajos rating de toda su historia y surgen nuevos ritmos y tonadas más tolerables.
En el Huila se despierta inusitado optimismo por la creación de nuevas empresas productivas con alto contenido tecnológico y valor agregado, de origen territorial.
Coletilla: Con verdadera expectativa se cumplen 25 años del Plan Integral de Neiva 1990 – 2015 (PIDNE II). Óptimo periodo para evaluar impactos y ejecuciones prospectivas.