La Nación
Caso de cutting en Palermo prende las alarmas 1 1 mayo, 2024
TEMA DEL DÍA

Caso de cutting en Palermo prende las alarmas

Cecilia González Villa

ceciliagonzalez@lanacion.com.co

En medio de una especie de juego macabro, un grupo de adolescentes alteró la tranquilidad de su colegio en el municipio de Palermo, hace algunos días.

Fueron siete muchachos con edades entre los 13 y 15 años de edad, de quienes inicialmente se dijo que habían intentado suicidarse, provocándose heridas en los brazos.

Sin embargo, las investigaciones de la autoridades lograron establecer que realmente se trató de la práctica de un reto que pedía auto agredirse, pero sin pasar a mayores.

El alcalde de Palermo, Víctor Polanía personalmente dirigió ayer un consejo de seguridad y explicó que el hecho sucedió a las 11:00 a.m. hora en la que los alumnos debían estar en clase, y desde ahí partirán las averiguaciones.

“Lo primero que vamos a indagar es qué hacían esos muchachos a las 11:00 a.m. fuera de las aulas de clase. El rector debe responder porque no estaban en hora de descanso, eran alumnos de diferentes grados”, precisó Polanía.

El alcalde Polanía dijo que las primeras versiones entregadas por los propios adolescentes dan cuenta de que se trató supuestamente de un ritual de amistad entre ellos y un desafío hecho desde internet lo que los llevó a hacerse algunas cortadas en sus brazos.

Pero realmente, de acuerdo con las  primeras conclusiones, los alumnos que se cortaron los brazos participaron en un juego llamado cutting, una conducta compulsiva que consiste en rayarse los brazos, antebrazos, abdomen, muslos y piernas con objetos filudos como una forma de calmar su ansiedad.

Lo ocurrido obligó al gobierno municipal a activar el protocolo con la Secretaría de Salud Departamental y a comenzar a pensar en el diseño de una estrategia educativa a través de la cual se busca que los muchachos se concienticen de lo peligroso que puede ser un juego como ese.

Y aunque se trata de una práctica más o menos común entre los adolescentes en todo el país, las autoridades no se atreven a confirmar si en el Huila es continua. Pero podría haber casos aislados o individuales.

Qué dijo el estudio

A la Secretaría de Salud Departamental fue trasladado el caso de cutting presentado en el municipio de Palermo.

Luz Elcy Manrique, líder Manrique, coordinadora Departamental de Salud Mental y líder del proceso de evaluación de Salud Pública dijo que lo ocurrido con los adolescentes en Palermo es una manifestación en la que se exploran prácticas lesivas pero alejadas de una intención suicida.

“Esa es una práctica que ellos han aprendido de rayarse la piel con manifestaciones de explorar dolor, sensaciones, pero no van más allá de una reacción netamente exploratoria que no está bien, pero tiene que ver con el conjunto de prácticas de riesgo”, explica Manrique.

Añade la funcionaria que estos adolescentes se encuentran en una edad en la que les gusta la aventura y los riesgos mediante los que se quieren medir y precisamente una de esas prácticas es cortarse la piel.

Según Manrique, mientras no sea un fenómeno totalmente repetitivo y que genere dependencia, se está frente a un problema fuera del marco de una atención de salud mental.

Con base en esta  afirmación, de todas maneras el caso de cutting registrado hace algunos días  en un colegio de Palermo, profesionales de la Secretaría de Salud Departamental con su homóloga municipal ha comenzado a hacer seguimiento al caso.

“Ya estamos con el equipo de Palermo haciendo seguimiento a los niños, a la familia así como una valoración de los riesgos en el entorno para no pasarlo por alto”, subrayó Manrique.

¿Por qué se cortan?

Los adolescentes que practican el cutting, según especialistas, lo que pretenden es buscar alivio a  sentimientos reprimidos entre ellos la tristeza y la depresión.

Se ha encontrado que algunas de las causas del cutting están relacionadas con abuso sexual, físico o emocional, bullying escolar, o violencia intrafamiliar e incluso estrés. Además, la falta de comunicación con sus familias.

Pero según Luz Elcy Manrique, coordinadora Departamental de Salud Mental y líder del proceso de evaluación de Salud Pública, también es  una manifestación de rebeldía por parte de los muchachos.

Incluso señala que el cutting se puede comparar con lo que ocurre con quienes se ponen piercig en la lengua y la nariz, conducen moto a velocidades de alto riesgo, o se lanzan al vacío. Es decir, son manifestaciones de aventura, riesgo extremo para sentir la adrenalina.

Lo mismo sucede con casos como el registrado en el municipio de Palestina donde algunos estudiantes participaron en el juego conocido como la tabla ouija.

Para Manrique, es lo mismo. Es otro atractivo para los jóvenes, como el misterio, lo oculto y rompimiento de reglas tradicionales, y llevar la contraria.

La oferta de redes sociales

Y es que según explica la funcionaria, contrario a lo que ocurría con los adolescentes de antes, los de ahora prefieren exponerse más y buscan aventuras de alto riesgo.

Añade que esto no tiene que ver con que los padres estén ahí, necesariamente, sino con la alta oferta de la sociedad y medios de comunicación a través de las redes sociales que activan en  los jóvenes los deseos de experimentar.

Sostiene que tampoco nada tiene que ver con que los padres antes eran más estrictos, pues anteriormente no tenían que competir con los celulares, las redes sociales y la tecnología agresiva que llama la atención de los jóvenes para que exploren diferentes prácticas de riesgo.

Ante este panorama, la experta recomienda a los padres de familia que estén atentos para evitar que esas prácticas pasen a patrones problemáticos.

Insiste en que a los adolescentes y jóvenes hay que inculcarles que ante cualquier frustración no se puede optar por caminos como cortarse, por ejemplo.

“Los padres deben involucrarse en toda la composición de habilidades para la vida. Habilidades de pensamiento crítico, que los niños aprendan tempranamente qué es bueno y malo. Habilidad para resolver situaciones frustrantes, superar emociones que son naturales y hacen parte de la vida”, puntualizó.

Qué hacer ante los retos de las redes sociales

Por Maritza Rocío López Vargas

Las nuevas generaciones se ven expuestos a retos virtuales, de páginas comoFacebook y de Whatsapp  que no siempre resultan ser divertidos ni inofensivos. Si no se presta atención oportuna a los mismos, se puede poner en riesgo la salud, vida e integridad de los menores de edad. Más que alarmarse en extremo,  prohibir o castigar físicamente   a   los   hijos por seguir estos desafíos, es importante que se les formen acerca del uso responsable de las tecnologías, mantenerse al tanto de las actividades que tienen en las redes sociales,   procurar   un   ambiente   de   confianza   y   comunicación   que   permita orientarlos,   asesorarlos   o   advertirles,   los   peligros   a   los   que   se   pueden   ver expuestos. Se   debe  estar   muy   atentos   a   conductas  extrañas, poco   frecuentes   o   cambios significativos en los hábitos de sueño;  identificar marcas inusuales en su cuerpo, crear   una   voz   de   alerta   si   hacen   preguntas   inusuales   sobre   cómo   morir   o suicidarse, fortalecer la red   familiar   para   apoyarlos cuando tengan dificultades, estén bajos de ánimo, hayan sufrido una decepción o un fracaso escolar. Se debe  evitar   el  maltrato,   los  abusos,  el   descuido o   la violencia  intrafamiliar; fortalecer en ellos su autoestima, sentido de pertenencia a una familia que lo ama y se preocupa por su bienestar integral; establecer horarios de acceso y uso del internet; utilizar herramientas de control parental como Qustodio disponible para dispositivos   móviles,   Secure   Kids   para   instalar   en   smartphones   o   en   tablets, Windows Live Family Safety para los usuarios de dispositivos Windows que viene con el sistema operativo de Microsoft o Control parental en IOS para los usuarios de dispositivos con sistema operativo Apple. De   saber   de   un   reto   virtual   perjudicial   para   los   hijos,   se   debe   cuanto   antes adelantar   la   denuncia   virtual   en   el   Centro   Cibernético   Policial:https://caivirtual.policia.gov.co/