20 anchetas ha entregado la patrullera Shirley Benítez a las familias menos favorecidas. La uniformada con recursos propios llega a los barrios de Timaná con arroz, azúcar, aceite, frijol y chocolate.
El grupo de infancia y adolescencia en el municipio de Timaná, logró desplegar una actividad diferencial en los barrios La Cruz y Centenario, donde realizando sus actividades diarias en favor de niños, niñas y adolescentes, la patrullera Shirley Benítez identificó la necesidad de algunas familias en la adquisición de sus alimentos.
Conociendo la problemática, se propuso a adquirir 20 anchetas con productos de primera necesidad de la canasta familiar tales como: arroz, sal, azúcar, café, panela, aceite, fideos, leche en polvo, coladas, galletas, frijol, harina, chocolate y alverjas, los cuales fueron entregados a familias en condición de vulnerabilidad, principalmente madres cabezas de hogar con niños de la primera infancia.
De igual forma, la patrullera invitó a las familias a acatar las medidas de bioseguridad, buscando la protección de aquellos que dependen del cuidado de los adultos.
Igualmente hizo la invitación a toda la comunidad timanense, para que haga uso del portafolio de servicio que ofrece la Policía de Infancia y Adolescencia, la cual tiene como función principal contribuir a la protección integral y garantías de los derechos y libertades de niños, niñas y adolescentes desde tres líneas.
Línea de prevención
Esta línea estratégica se desarrolla a través del programa “Abre Tus Ojos”, con la cual se busca identificar y contrarrestar factores de riegos y causas facilitadoras de los fenómenos a los que se ven expuestos en cualquier entorno donde se desenvuelvan.
Línea de vigilancia y control
Está dirigida a disuadir y neutralizar situaciones en las cuales los niños y adolescentes se encuentren en riego, mediante la ejecución de planes especiales en lugares públicos y privados.
Investigación criminal
Es la encargada de apoyar a las autoridades competentes en el desarrollo de las labores investigativas y técnicas en los procesos judiciales en que estén involucrados niños, niñas y adolescentes, como autores partícipes de un delito, o como víctimas, buscando su protección. Entre sus grandes objetivos se encuentra la neutralización de redes dedicadas a la pornografía infantil, a través de las nuevas tecnologías y la globalización de la información.