La Nación
De leal no tiene nada 1 26 abril, 2024
COLUMNISTAS OPINIÓN

De leal no tiene nada

Jorge Andrés Géchem

Cada vez que leo y veo noticias sobre el asesinato de Mauricio Leal y su madre Marleny Hernández no deja de darme asombro y dolor. ¿Cómo un hermano e hijo es capaz de asesinar a su propia familia, a su hermano, a su mamá y con tanta sevicia y rabia? ¿Qué le pasaba realmente por la cabeza? ¿Qué pensar desde afuera y como sociedad?

Los problemas de salud mental y los sentimientos retraídos en las personas tienen la dificultad extrema de que pueden ser invisibles externamente pero muy fuertes al interior de las personas. Desde afuera se puede observar a una persona aparentemente bien, sonriente, que no le falta nada, pero realmente no se sabe qué le da vueltas en su cabeza o qué tiene en su corazón. Bien señala el adagio popular: “La procesión va por dentro”. ¿Cómo explicarse lo sucedido? ¿Cuánto tiempo antes lo planeó o explotó en el momento de manera repentina?

En la construcción de una mejor Colombia se hace urgente trabajar en el tejido social. Las obras de cemento son importantes, pero la pandemia nos profundiza en el enfoque del “ser”, de la persona, de la familia. Solo formando “seres humanos” podremos dar el salto para una mejor sociedad que sea el soporte de un país que recupere la seguridad, genere más empleo, impulse el emprendimiento, respete la diferencia y devuelva la confianza de la ciudadanía.

El castigo debe ser ejemplarizante, sin titubeo, la máxima pena en el marco de nuestro sistema de justicia, y paralelamente la reflexión como sociedad también hay que darla. La realidad del país, el desempleo, la informalidad, la cuarentena, la inseguridad, la polarización, todo esto agudizado por la pandemia de más de dos años, mezclado con los sentimientos dañinos de la envidia, los celos, la rabia, egos, individualismos conllevan a una enorme preocupación que afecta la convivencia y la felicidad personal y de la sociedad. La atención integral pensada en la persona, las estrategias preventivas y de acompañamiento a la salud mental son una prioridad como nación y para el próximo presidente (a) de Colombia.

Esto debe ser un tópico más fuerte en la educación, en la formación de nuestros niños y niñas, que en su aula y en su casa se forman como personas. La articulación entre salud, educación, deporte, cultura, proyecto de vida, oportunidades y familia es el anillo conducente para ser efectivos.

Son muchas las angustias ciudadanas, la tranquilidad es indispensable para el vivir sano, por eso es imperioso brindar soluciones para los problemas reales de inseguridad, desempleo, pobreza, hambre y corrupción que arrebata el progreso, acrecienta los sufrimientos y ataca la salud mental. Para esto debemos entender que siempre hay que construir, pero con visión a largo plazo y de manera integral.