La Nación
Guardería infantil, operaba de forma clandestina en Neiva 1 8 mayo, 2024
NEIVA

Guardería infantil, operaba de forma clandestina en Neiva

El jardín infantil Mi Bebé Feliz, con sede en el barrio La Gaitana de Neiva, fue sorprendido por las autoridades, violando los protocolos de bioseguridad y ejerciendo actividad de forma clandestina y sin autorización.

 

Gracias a la información de un ciudadano, la Policía Metropolitana logró hacer efectiva una orden de suspensión de la actividad educativa, a una guardería ubicada en el barrio La Gaitana, que violando los protocolos de bioseguridad y sin autorización alguna, ejercía labores en el plantel donde principalmente los estudiantes son niños menores de 6 años.

El cese temporal de la actividad se hizo efectiva el día de ayer, luego de la presencia de uniformados de la Policía Metropolitana de Neiva, que alertados por la comunidad de la presencia de estudiantes a las afueras del centro educativo, iniciaron la respectiva verificación de los protocolos de bioseguridad, donde confirmaron que en efecto, el lugar de razón social sala cuna Mi Bebé Feliz, estaba operando de manera clandestina, sin ningún tipo de autorización y violando el decreto 699 de 2020 expedido por la Alcaldía de Neiva.

Niños a cargo

De acuerdo a lo manifestado por la administradora del jardín infantil, a cargo estaban aproximadamente 10 niños, que eran alternados entre la jornada de la mañana y de la tarde, adicional a ello indicó que los padres de familia habían brindado total respaldo para el ejercicio de la actividad, teniendo claro que actualmente está prohibido el regreso a clases y la apertura de instituciones educativas, colegios y centros de enseñanza.

Finalmente, la persona a cargo del lugar fue acreedora al respectivo comparendo, igualmente por parte de la Policía Metropolitana, se hizo el cese de la actividad, hasta tanto no haya una reglamentación permitida a nivel municipal, que permita la reapertura de colegios y entornos educativos.

“Es preocupante la irresponsabilidad por parte tanto de los padres como de la propietaria del lugar, los niños que salían y entraban del lugar eran bebés, y niños muy pequeños, que estando expuestos ante este virus, corren peligro. Operar de esta forma es ir en contra de los lineamientos y reglamentos municipales, teniendo en cuenta la pandemia que atravesamos y el peligro latente que tenemos” expresó Viviana Cardona, residente del barrio La Gaitana.