El Intendente Luis Ernesto Sabí Aguja, integra el grupo de expertos investigadores de la Dijin contra los delitos sexuales y la familia, que fue seleccionado para capacitar e intercambiar experiencias con la Policía Nacional Civil de Guatemala, país donde al igual que Colombia, los índices de casos por este flagelo son preocupantes.
AMAURY MACHADO RUEDA/LN
El Intendente Luis Ernesto Sabí Aguja es psicólogo, investigador criminal y actual jefe del Grupo Investigativo de los Delitos Sexuales y la Familia de la Sijin Metropolitana de Neiva, quien desde hace varios años viene liderando procesos de investigación criminal en torno a esta clase de delitos que cada año deja un altísimo número de afectados.
En el departamento de Vaupés, este neivano pudo realizar la misión de combatir la trata de personas, logrando rescatar en la frontera colombo-brasilera a 10 niñas que estaban siendo explotadas sexual y comercialmente por redes criminales, labor a la que fue enviado por 30 meses por la Dijin en asocio con Fuerzas Militares de Colombia y Brasil.
Estos resultados que impactaron positivamente le permitieron ser escogido por la Dirección de Investigación Criminal e Interpol Dijin de la Policía Nacional de Colombia, para liderar una comisión de expertos que durante 30 días impartieron asesoría mediante el Diplomado en Investigación Criminal con Énfasis en Delitos Sexuales, a 30 Agentes del Departamento de Investigación Contra Delitos Sexuales de la Subdirección General de Investigación Criminal de la Policía Nacional Civil, PNC-SGIC de Guatemala.
La capacitación que se llevó a cabo a finales del 2017, en la ciudad de Guatemala, tenía como propósito enseñar y compartir experiencias y conocimientos en materia de investigación en todo lo relacionado a estos crímenes: conceptos universales, recepción de la denuncia, modelo de atención integral a víctimas, procesamiento de la escena del crimen, modus operandi, factores generadores, perfilación criminal, entrevista forense, y re victimización de las y los afectados por este flagelo.
El Intendente habló sobre esta experiencia en el país centroamericano.
“Tanto en Guatemala como en Colombia la estructura judicial, los crímenes, los modus operandi, los rituales de hecho, son muy similares. También allí la mujer, de cualquier edad, sigue siendo la principal vulnerada, y se producen muchos casos de abuso sexual en el entorno familiar o por parte de personas muy allegadas al hogar que se ganan la confianza de niños y adolescentes para cometer estos delitos.”
Indicó que el país de Guatemala tiene muy bien visto el trabajo que desarrolla la Policía Nacional de Colombia.
“La Policía nacional civil de Guatemala fue reestructurada hace 20 años dentro de un proceso de paz muy similar al que se está dando en nuestro país, ellos tuvieron allí una reforma y han tenido como base la asesoría de la Policía colombiana en este proceso de modernización porque identifican en ella que tenemos las suficientes herramientas tecnológicas y especialmente el talento humano, hemos sido capacitados y entrenados inclusive por la misma embajada de los Estados Unidos que es la que apoya estos procesos a través del programa de asistencia a los países de Centroamérica y Latinoamérica, y se ha escogido a la de Colombia como una de las mejores policías del mundo, por eso nos tienen como un muy buen referente”.
Policías de diferentes provincias o regiones de Guatemala, participaron en el diplomado que se llevó a cabo gracias al mencionado proceso de política de intercambio. En este espacio se compartieron algunos de los casos de abuso y la manera como son abordados”.
“Una de las particularidades que encontré allí en Guatemala es que los jueces obligan a los investigadores a llevar al lugar de los hechos a la víctima, me explico, una persona que fue abusada hace 6 meses debe por orden de un juez ir nuevamente en terreno y estar en el lugar donde fue abusada y expresarle a los investigadores cómo fue ese abuso. Esto conlleva muchas veces a que la persona se retracte o no quiera seguir con el proceso porque es que la estamos re victimizando. Esa fue una de las recomendaciones que más desarrollamos quienes hicimos parte de esta comisión. Otra de las recomendaciones fueron la continuidad de estos procesos de intercambio, también mediante videoconferencias, para las asesorías a las diferentes situaciones”, comenta el Intendente Sabí.
Mencionó que la Policía de nuestro país, brinda también asistencia en asesoría a Honduras, El Salvador, Ecuador, Perú, Chile, Panamá, incluso muchos jóvenes de estas naciones viajan a Colombia a realizar cursos para luego ejercer la profesión de policías en su país.
Estrategia Entornos Seguros
Este año se amplió a 32 la cobertura de establecimientos educativos del área metropolitana de Neiva con esta estrategia de la Policía de ‘Entornos Seguros’, que permite desarrollar actividades permanentes como vigilancia diaria al ingreso y salida de los estudiantes, campañas de prevención sobre delitos sexuales, trata de personas, violencia de género, uso adecuado de las redes sociales, uso adecuado del tiempo libre, autoprotección, y prevención del consumo de sustancias sicoactivas.
“Todo lo anterior puede generar como resultado nefasto la comisión de estos delitos. La principal herramienta que los criminales utilizan son las redes sociales, que permiten que los niños sean captados y abusados, y se puede dar el intercambio de fotografías de contenido sexual”, explica el investigador.
El caso de Juan Carlos Sánchez, conocido como el “Lobo Feroz”, que abusó sexualmente de unos 500 niños para vender los videos de las violaciones por internet, es uno de los casos que horrorizó a la comunidad. Una de sus últimas víctimas tenía tan solo 14 meses de nacida y los demás estaban entre los 8 y los 14 años de edad. Semejante abominación no solo lo convierte a este sujeto oriundo de Barranquilla, en uno de los mayores violadores seriales del mundo. Por la macabra forma en que cometió los crímenes también los expertos lo consideran uno de los mayores pederastas y psicópatas conocidos de la historia reciente.
Sánchez buscaba a sus víctimas en centros comerciales o locales en barrios en donde había juegos de video frecuentados por menores. Allí tomaba fotos con su celular de varios niños. También captaba imágenes de jovencitos en barrios marginales y cerca del lugar donde vivía. Como si se tratara de un catálogo, las enviaba a otro sujeto en México. Este le indicaba a cuál niño seleccionar y el valor que le pagaría. Una vez elegido, el Lobo salía a buscarlos. Aprovechando su afición a los videojuegos, entablaba fácilmente charla y se ganaba muy pronto la confianza del niño que había sido señalado.
Los persuadía de ir con él a jugar videojuegos en su casa. Una vez allí inicialmente les ofrecía entre 2.000 y 5.000 pesos a los menores por dejarse fotografiar desnudos. Al negarse los amenazaba y posteriormente usando la fuerza los sometía y abusaba sexualmente de ellos, según explicó la Dijín.
“Personas como estas se aprovechan muchas veces de las necesidades de cariño y afecto que no le brindan a los niños en su hogar, y empiezan a construir todo un tramaje para captar a los niños a través de la red, y buscan solamente abusarlos”. Comenta Sabí.
Dice el Intendente que lo más importante es la prevención, por eso hace la invitación a los padres de familia, profesores, y toda la comunidad a generar una consciencia contra estos crímenes.
“Hace dos semanas inició el calendario escolar 2018 y ya han resultado casos que desafortunadamente se dieron durante el periodo de vacaciones. Cuando uno va por los colegios dando las charlas de prevención muchos estudiantes nos dan a conocer esos casos a los cuales se les brinda todo el acompañamiento y atención integral a las víctimas de violencia sexual, pero lo importante es prevenir y contrarrestar la existencia de estos delitos”.
Y es que del 1 de enero a 29 de febrero de 2018, se ha registrado en Neiva la denuncia de 17 casos de abuso sexual. En el mismo periodo del 2017, se tenían 10 casos.
Una misión profesional y laborar
El Intendente Sabí Aguja tienen 36 años, 19 de ellos los ha dedicado a prestar su servicio a la Policía Nacional. Su deseo de aportar a que no haya más víctimas de abuso sexual, lo ha conllevado a impartir sus conocimientos más allá de las fronteras, y a crear estrategias con este propósito.
En redes sociales éste policía huilense tiene una página de Facebbok que busca generar y despertar conciencia en la ciudadanía, y cuenta con algunos aliados en materia de prevención como en España, con Romina Valaguer, una mujer que fue abusada sexualmente durante 20 años por su propio padre; en Argentina con la RATP, Redes Anti Trata de Personas; y en Chile, Panamá, donde de una u otra forma trabajan en esta labor que viene fortaleciendo.
¿Qué pasa por la mente de un violador?
En momentos desoladores y de transgresión con nuestros niños y niñas colombianos, no puedo evitar evocar con melancolía a la desaparecida exsenadora Gilma Jiménez, quien era la promotora del referendo que buscaba implementar la cadena perpetua para los violadores y abusadores de menores de edad. Sin embargo, Jiménez no alcanzó dicho propósito. Hoy, después de casi cinco años de su partida, aún seguimos sufriendo la violencia sexual y vulneración de los derechos de nuestros pequeños.
La sociedad sigue cuestionándose acerca de ¿Qué sucede en la cabeza de un violador? Culpar a un solo factor es muy difícil. Es una acumulación de muchas causas, es multifactorial, es una codificación genética, es un ambiente social hostil y hasta el consumo de sustancias psicoactivas, entre otros (Martínez, 2004). Los abusadores sexuales, no sienten ni remordimiento, ni culpa, padecen de algo conocido como ausencia física, mental y moral. De igual forma, los abusadores sexuales, en su mayoría son individuos con trastornos de la personalidad, entre ellas, el trastorno de personalidad sociópata o antisocial. Estos diferentes tipos de alteraciones hacen en el individuo que pueda tener uso de sus facultades, discriminar entre lo que es bueno o malo, pero es incapaz de sentir dolor por el otro (Gutiérrez, 2011). Eso hay en la cabeza de un agresor, de un abusador, de un violador: una fantasía sexual, que no interesa a quien se vaya a realizar la acción, lo único que tiene en mente es satisfacer su fantasía.
Por este motivo, invito a que sigamos luchando por los derechos de los niños, niñas y adolescentes de nuestro país, ya que, el abuso sexual de niños no es un tema de loquitos, es un tema de sociedad (Gilma Jimenez).
Silvana Velásquez
Apoyo Profesional Secretaria De Salud Departamental.
Miembro Red Mundial de Suicidiología-Colombia
