Le aplican su propia medicina y Germán Casagua, el alcalde de Neiva, no parece o no quisiera entenderlo. El Concejo de Neiva en cuatro meses no le ha aprobado el primer proyecto por las tortuosas relaciones entre el mandatario -que llegó con dosis de soberbia quizás por su edad e inexperiencia en el sector público- y el cabildo.
Además porque parece rodeado de secretarios torpes e ingenuos que no entienden las dinámicas de la Alcaldía y desconocen cómo se presentan los acuerdos de ley. Que le digan a Casagua que así sea el alcalde, el presidente del Concejo es Juan Diego Amaya y tiene el poder para fastidiarlo políticamente, así se resista a creerlo.
O, ¿cómo logró entorpecer el proyecto de reestructuración por falta de un estudio técnico que confirmara qué secretarías iba a sustituir y cuáles no iba a tocar? ¿Acaso, algunos concejales, inconformes con el mandatario, no dilataron el debate y se archivó el proyecto por falta de tiempo?
Los asesores del primer mandatario pagaron su primiparada por desconocer el reglamento interno del Concejo. Lo siento, pero los concejales tienen razón. Gorky Muñoz- según le dijo a Neiva el propio Casagua- dejó a la Alcaldía endeudada y con una planta de personal insostenible. Si es así, lo lamento por el alcalde, pero los concejales hicieron bien en no otorgarle unas facultades plenas para que hiciera lo que se le antojara. O presenta un estudio serio y técnico, o no hay reestructuración porque la improvisación terminó.
Por cierto, increíble que otro de sus proyectos que buscaba unas exenciones tributarias se cayera porque el secretario de Hacienda, Óscar Iván Leyva Bocanegra, además del equipo jurídico, nunca pudieron defender la iniciativa que se ha caído por vicios de legalidad en otras regiones del país. El Alcalde, con un tufillo de derrota, procedió a retirarlo del Concejo.
Vergonzoso. ¿No lo estudiaron antes? ¿Por qué improvisan? No imagino cuando el Alcalde presente al Concejo sus proyectos con nuevos endeudamientos. ¿Los defenderá Omaira Curiel, su suegra, en alianza con Hernán Casagua, su padre? La falta de comunicación entre el Alcalde y el Cabildo es tan grande que el concejal Jesús Garzón- el hijo del ‘chulo’- salió descontento porque él era el ponente y no le habían avisado del retiro. Se sintió burlado.
Lo más triste: beneficiaría a centenares de neivanos que están debiendo impuestos e intereses al municipio. Si Casagua no se pone las pilas y deja de estar bailando y pensando en San Pedro, sus concejales amigos estallarán en mil pedazos. Y ni siquiera tendrá una coalición sólida que le respalde sus proyectos. ¿O no vieron cómo se enfrentaron esta semana Johan Steed Ortiz y Yamid Sanabria, casaguitas pura sangre? O, ¿Los enfrentamientos entre Juan Diego Amaya y la mesa directiva del Concejo, entre ellos, Camilo Perdomo, alfil del Alcalde?
Como vamos, el Concejo lo terminará manejando los curtidos concejales que vienen de años atrás y hoy están en la independencia. Lo siento nuevamente por Casagua, pero ni a Gorky Muñoz le fue igual en sus primeros cuatro meses con el Concejo de Neiva. Debería mejorar las relaciones políticas, controlar el fuego amigo y las flechas rotas y apretar tuercas con sus secretarios. Por cierto, muchos de ellos, desaparecidos.
El alcalde no debería gastar su tiempo repartiendo volantes contra la criminalidad. O, ¿el tiempo le sobra? O, ¿cree que su rostro y sus transmisiones en vivo en redes sociales hará débiles a los delincuentes que correrán a entregarse a sus brazos?