La Nación
‘Ingeniero civil y estudiante de química quería ejecutar un atentado en Neiva’ 1 27 abril, 2024
JUDICIAL NEIVA

‘Ingeniero civil y estudiante de química quería ejecutar un atentado en Neiva’

“Usted contaba con los accesorios esenciales para la fabricación de explosivos”, le dijo la fiscal al joven ingeniero civil y estudiante de química Julián Felipe Medina González, sorprendido cuando al parecer pretendía realizar un atentado en el oriente de Neiva.

El señalamiento contra el joven, que padece de esquizofrenia, fue hecho ayer por la Fiscal Décima Local URI ante la Jueza Cuarta Penal Municipal de Neiva con Funciones de Garantías, en desarrolló de las audiencias preliminares.

Medina González, de 27 años de edad, deberá responder ante la justicia por los delitos de terrorismo tentado y porte de explosivos, cargos que le imputó la delegada del ente acusador, tras ser capturado con sustancias químicas con las que presuntamente iba a elaborar una bomba incendiaria. “Fiscalía cuenta con elementos materiales probatorios y evidencia física, a partir de los cuales se puede inferir razonablemente que usted es probable autor de los delitos…”, manifestó la fiscal.

La detención del estudiante de Ingeniería Química en la Universidad Nacional en la ciudad de Bogotá, ocurrió hacia las 4:20 de la madrugada del pasado martes en el sector de los conteiner de la plazoleta de comida Foods Place en el barrio Ipanema en el oriente de Neiva.

La presencia sospechosa del joven en el lugar, fue advertida por una persona, que informó inmediatamente a los policías que se encontraban en el CAI ubicado a un costado de la plazoleta de comida y quienes acudieron a verificar que sucedía. “Un servidor de la Policía que se encontraba en el CAI de Ipanema fue informado por un ciudadano que en los conteiner de la plazoleta de comidas rápida había una persona vestida de negro”, manifestó la fiscal en las diligencias judiciales.

Agregó que cuando el policial llegó al lugar, encontró a Medina González detrás de una de las pipetas de gas de uno de los conteiner de comidas rápidas. “El uniformado llegó al lugar, lo observó a usted Julián Felipe Medina, estaba de atrás de un cilindro de gas propano, y tenía en su poder un bolso negro”, señaló la delegada del ente acusador.

El uniformado y su compañero con cautela se acercaron al joven y tras requerirlo, se trasladaron al CAI donde en medio del registro le encontraron en un bolsillo una mechera y un tábano, y en el bolso llevaba tarro plástico que tenía Acpm, cuatro frascos que contenían gasolina y un recipiente plástico con una sustancia que parecía pólvora de color gris. “El capturado manifestó que no era pólvora sino ácido ferroso (sirve para construir artefactos explosivos)”, indicó la fiscal.

Las sustancias fueron llevadas al laboratorio de la Sijin donde un experto en explosivos de la Policía al analizarlas estableció que con ellas se podían fabricar explosivos. “Las sustancias químicas fueron objeto de estudio y se estableció que este tipo de sustancia es considerada materia prima o insumo que sin ser explosivos individuales, en conjunto constituyen una sustancia explosiva. Se reúnen todos los elementos indispensables para hacer un artefacto explosivo”, sostuvo la funcionaria judicial.

Sobre la sustancia que parecía pólvora, el perito policial señaló que era una “mezcla incendiaria improvisada que puede unirse con una combinación de una o más sustancias químicas sólidas o líquidas que pueden producir fuego o explosión cuando…pueden ocasionar daños, amputaciones o hasta la muerte”, indicó la fiscal.

Además le fueron hallados un cuello estilo pasamontaña de color negro, una gorra negra, cinco guantes de látex de color negro, una caja de fósforos, una cámara fotográfica, gafas transparentes plásticas, un tapabocas, un pañuelo blanco impregnado de cloro, y una tira de aluminio.

 

Condición especial

La jueza de garantías benefició con detención domiciliaria a Medina González, al analizar los argumentos de su defensa.

La abogada sostuvo que su cliente padecía de una condición especial psiquiátrica.

El joven sufre de esquizofrenia paranoide y consume fármacos para mantenerse estable.

La Fiscalía había solicitado medida de aseguramiento en centro carcelario.