La Nación
Mala prensa 1 29 abril, 2024
COLUMNISTAS OPINIÓN

Mala prensa

Por: Jorge Luis Salcedo

 

La prensa radial y escrita, incluso la mala prensa que se hace a través de las redes sociales, repercute negativamente contra ellos mismos pues la radio, la tv, la prensa escrita además de los youtubers, o, influenciadores son financiados económicamente por la industria, el comercio y el Estado.

Cuando hay crisis económica, paros y se estimula la violencia para publicar amarillismo que en un principio puede vender mucho, a la larga esto causa despidos de empleados, recortes presupuestales, cierre de empresas y uno de esos recortes lo hacen las empresas en la rama publicitaria. Lo hacen más que todo por tratar de defender los gastos prioritarios; como el pago de impuestos y parafiscales de los pocos empleados que estén, o, queden por nómina, y si les alcanza: tener para comprar materia prima y pago de servicios.

Ahora con los bloqueos en las carreteras todo empeora, pues la prensa y los medios no valoran el esfuerzo y sacrificio de la policía y el ejército. Al contrario, quieren que el Estado los ponga a descansar y los guarde en sus cuarteles mientras afuera se incuba una guerra civil, pues sería el único remedio para acabar con el secuestro en el que se tiene al pueblo colombiano.

Se dice que con diálogo se puede acabar con los paros y los bloqueos. Pero yo me pregunto ¿Quién nombró y en qué elecciones populares como representantes de nuestros derechos y necesidades a  esos negociadores que tan radicalmente atacan al Estado y pretenden sacar provecho para una minoría de antisociales que destruyen ciudades, bloquean la economía y disparan con piedra, papas bombas, bombas incendiarias, tiros de armas de fuego y fuerza bruta como asesinatos, violaciones, ataque a ambulancias con pacientes causando muertes de inocentes y en fin; quién los nombró como supuestos defensores? Acudir a CIDH para denunciar crímenes de Estado, pero no denuncian sus crímenes, destrozos, secuestros y muchos desmanes. En fin, la mala prensa quiere que le financien, pero no sabe que destruyendo la libertad de un país apoyando la dictadura de unos sindicalistas de mala leche están auto destruyéndose.

 

Aprovecho este artículo para pedirle a los gobiernos departamentales y municipales que sean más cautelosos, que no se abran a una economía de puertas abiertas aún. Pues mientras menos camas en UCI tenemos disponibles, menos medicamentos y oxígeno, están causando una muerte masiva que pronto sobrepasará de los 100.000 por el covid-19. Tampoco se puede abusar del cuerpo médico y personal de enfermería y otros.

Hay razón para preocuparse por los muertos y heridos en estos 40 días de paro y bloqueos. Pero a nadie le importa los 100.000 del covid-19 estimulados aún más por los “científicos del paro”.