La Nación
COLUMNISTAS

Monumento a la intolerancia

En las estribaciones del macizo colombiano, muy cerca al nacimiento de la laguna del Rio Magdalena, luce en ese paisaje esplendido el municipio de San Agustín, allí se encuentra ubicado el parque arqueológico, lugar de portentosas obras esculpidas en piedras, testimonio de una civilización que en su visión imaginaria, dejo un legado para el mundo, declarado por la UNESCO en 1995 como patrimonio histórico de la humanidad.

Con motivo de la próxima conmemoración de los cien años del descubrimiento arqueológico de la cultura agustiniana, esas majestuosas obras megalíticas recobran vida para expresar en sus voces arcaicas, el desconcierto causado por la intolerancia, insensatez y ánimo apasionado desmedido, al impedir su exposición en el museo más importante de la capital de la Republica de Colombia;  olvidando los opositores acérrimos, que es una herencia cultural de interés no solo de los colombianos, si no de la comunidad internacional, la cual lleva implícita la responsabilidad de preservar estos sitios a las generaciones venideras, donde existen posibilidades de obtener fuentes de financiación del orden nacional y recursos de convenios de cooperación internacional con destino a su protección.  

La protesta ciudadana es valida, cuando se realiza con espíritu critico constructivo, se requiere de un verdadero liderazgo creativo, con capacidad de cohesionar esfuerzos condesados en un plan estratégico, con el objetivo jalonar recursos económicos que permitan mejorar las condiciones de vida la gente, embellecer urbanísticas la capital arqueológica de Suramérica, dotar de vías apropiadas a este región del país, estimular el espíritu empresarial hacia el desarrollo de infraestructura de servicios hoteleros, con el propósito transformar a San Agustín en un destino turístico de marca mundial.

La Universidad Surcolombiana, Cooperativa de Colombia,  Antonio Nariño y, Corhuila en una alianza pública privada, deben estudiar la posibilidad que  mediante aulas virtuales o modalidad presencia o semipresencial, la gente joven pueda estudiar carreras tecnológicas afines a la vocación turística y agropecuaria de la región. La catedra agustiniana en escuelas, colegios e instituciones del nivel superior en el Huila, es otro desafío al orden del día.   

Las autoridades municipales en representación de la comunidad están en su derecho a exigir con sensatez, las garantías necesarias en el traslado de estas reliquias históricas, su retorno pronto y seguro al sitio de origen. Históricamente el binomio anarquía y vandalismo engendra únicamente violencia; no olviden, las barreras ideologías se derumbaron con la caída del muro de Berlín.