La Nación
‘En el Huila no hay unidad’ 1 14 mayo, 2024
LA NACIÓN +

‘En el Huila no hay unidad’

Monseñor Froilán Casas Ortiz cumple su primer año de haber sido designado Obispo de Neiva. LA NACIÓN habló con él sobre la situación de la Iglesia Católica tras la renuncia del Papa. Entrevista con la Directora

Monseñor Froilán Casas Ortiz cumple su primer año de haber sido designado Obispo de Neiva. LA NACIÓN habló con él sobre la situación de la Iglesia Católica tras la renuncia del Papa. Además, se refiere a la situación social, política y las necesidades del departamento. GLORIA CECILIA GÓMEZ DE LIÉVANO LA NACIÓN, NEIVA Monseñor Froilán Casas habla duro y opina de todo. Sobre política, la situación social, el mal estado de las vías, de los Obispohomosexuales y hasta del orinal del aeropuerto. Ha recorrido el departamento y eso le permite ser enfático y crítico en sus apreciaciones. La gente lo escucha y no vacila en exigir a la clase dirigente que se una para demandar al Gobierno Nacional inversión en vías y desarrollo. Con su particular forma de ser, abierto y riguroso, habló con LA NACIÓN, advirtiendo que su voz no se callará para defender la Iglesia ni para denunciar los atropellos y las injusticias. ¿Lo sorprendió la abrupta renuncia del Papa Benedicto XVI? No. Yo, incluso, esperaba esto desde antes. En teología he dicho: ¿pero quién ha dicho que el Papa no puede renunciar? Es lo normal. Que se puede crear un cisma, dice la gente… ¿pero por qué? Si el que renuncia deja la sede y permite que el otro llegue a guiar la iglesia. De manera que el gesto del Papa Benedicto XVI me impactó positivamente hasta el punto que lo quiero más, porque tuvo la entereza de carácter, la humildad… Fue humilde y el humilde ¡es grande ante Dios! Usted cree que los escándalos de la Iglesia Católica en los últimos tiempos, ¿tuvieron que ver con esta renuncia? No, no creo. Los problemas de cualquier organización siempre están, otra cosa es que se publiquen. Lo que pasa es que todos atacan a La Iglesia, porque es la que se conoce, pero en cualquier organización de índole religiosa, política, académica, se encuentran unas ollas podridas… Eso es en todas partes… Eso no justifica que en la Iglesia no ocurra, lo que pasa es que de la Iglesia se espera más. Se espera perfección. El hecho que los escándalos que ha habido se publiquen, es porque hoy nada es privado. ¿Y el tema de la pedofilia? El tema de pedofilia es lamentable. Pero le aseguro que de 50 casos de pedofilia uno es de un sacerdote. Y el que se publica es precisamente ese, los otros 49 no.  Obviamente, hay que censurar al sacerdote, que se aplique la ley. Pero porque uno falló, entonces ¿todos tenemos que callarnos?… ¡no señores!, y el Santo Padre afrontó el problema con entereza de carácter. Yo no veo nada que tenga que ver en la renuncia con ese aspecto. Yo creo que él por su cansancio físico, con humildad renunció. ¡Me imagino cuánto oraría ante el Santísimo! Monseñor, pero el Papa habló de la división de la Iglesia… Hay una frase latina, la Iglesia ‘center reformanda’, ‘la Iglesia siempre debe reformarse’. Es decir, la iglesia soy yo, es usted, es la gente, no es la estructura física. Y uno tiene que reformarse. Yo con frecuencia reflexiono, tengo que estar arrepintiéndome de los errores, también le doy gracias a Dios por mis aciertos. Entonces, me parece que esa división se da. De hecho hay mucha desobediencia de la Iglesia. Hay grupos que quieren hacer su propia religión, apariciones de la virgen acomodadas a los caprichos de cada persona, hay mucho egoísmo y eso hay que combatirlo. El Santo Padre constató eso, no es nada nuevo, lamentablemente si uno lee en el evangelio que le dice Jesús a la gente: ‘Duros de servir, tercos y circuncisos, corazones de piedra’, Jesús habló muy claro en su época, y pasa hoy, en la iglesia de ahorita. ¿Cuál es ese perfil que necesita la Iglesia Católica para ese nuevo Papa? Primero que todo, un hombre lleno de Dios. Un hombre de sabiduría. Una persona de un nivel académico alto. Una vida santa, coherente, un hombre abierto al mundo, pero con la firmeza del evangelio, abierto a dialogar pero sin negociar, porque Jesucristo no se negocia, se ofrece, no se impone. Ese es el Papa que todos los cristianos católicos esperamos. Que el Espíritu Santo asista sobre el Colegio de Cardenales para que durante el mes de marzo, en el cónclave se establezca esa figura de ese hombre. ¿La Iglesia Católica queda debilitada? Sí, la veo disminuida de números. Creo que seguimos disminuyendo. Yo veo una ignorancia religiosa enorme en los cristianos católicos, no conocen la Biblia… y una persona cristiana católica no estructurada, pues cae en el escepticismo, en el diferentismo, se van a otras confesiones. Por eso necesitamos parroquias fuertes, con sacerdotes llenos de Dios, grupos donde se escrute la Biblia, escuelas bíblicas. Si no conocemos la palabra de Dios, tendremos mucha religiosidad pero poco compromiso con la palabra y con el evangelio. Para un mundo como el de hoy, ¿no resulta retrógrada la Iglesia Católica? No, la iglesia no es retrógrada para nada, ni la iglesia es de negociar, ni debe contemporizar… ¡no!. Por ejemplo en cuestiones de vida familiar, el matrimonio es integrado por marido y mujer, entonces ¿hay que matar a las homosexuales? ¡no!. Ellos son hijos de Dios, ellos también son llamados a la salvación, son personas que merecen respeto. Pero por favor, que establezcamos el matrimonio entre varones o mujeres eso no es nada del otro mundo, esa es la realidad de la ley natural. ¿Y en temas como el de los condones, el control natal? Pues el tema de condones pues también ahora tenemos el Sida, el VHS, todo ese problema… pues yo no sé… no es que yo pueda aprobar, pero eso le toca a las autoridades sanitarias, establecer las normas, la cultura, la educación sexual, ¿a quién le va a gustar esas enfermedades, ese contagio? Pero obviamente, yo no puedo dar determinaciones, eso lo dan las autoridades civiles. Yo debo respetar también las posiciones, y lo que se debe hacer es educar sexualmente a la gente para que haya respeto al cuerpo y en este orden, pues también respeto a la vida. ¿Cómo encuentra la situación social aquí en el Huila? Yo veo la gente muy linda, muy querida, por eso me duele cuando en los diarios  todos días veo muertes, atracos, asesinatos… eso ¡cómo le duele a uno! Me duele que a veces la clase dirigente no se una para atender al departamento. Yo quisiera un departamento con doble calzada desde El Espinal hasta Pitalito,  quiero ver un departamento con buenas vías. Me da tristeza ver esas carreteras… la malla vial destruida. No entiendo cómo no se atiende fundamentalmente estos aspectos. ¿Qué recomendaciones daría usted, Monseñor? Necesitamos una clase dirigente unida, que presente proyectos, que haga peso ante el gobierno nacional. Como pasa en otros departamentos, por ejemplo en Antioquia, ellos pueden estar divididos en la política pero cuando se trata de pedir para el departamento es un solo hombre, una sola persona. Entonces me parece que en el Huila hace falta unidad. Yo critico a la clase dirigente con la que debo estar relacionada, que debo apoyar, que hace falta más sentido de huilensidad, para que se tomen las decisiones pensando en el departamento y no en el grupito, en mi partido, sino en el bien del departamento. ¿Cómo vio la crisis de la Gobernación y las nuevas elecciones? Fue lamentable que eso haya ocurrido. Uno quiere un gobernador que pueda ejecutar todo un programa de gobierno. A la doctora Cielo le tocó duro, le tengo respeto y afecto, pero para el departamento ahora vienen elecciones atípicas. Ojalá se elija una persona que busque el bien del departamento, que gobierne al Huila y no a un grupo determinado. En el fondo perdimos en el Huila. Ahora otra gobernación, un gobernador que durará dos años no es favorable para todo un programa de gobierno, pero ya nos tocó así. Ojalá que se sepa elegir a las personas que puedan gobernar. Usted como primer autoridad católica del departamento ¿qué le exige a los gobernantes? Que inviertan. Mire, en Colombia tenemos una cascada de impuestos. Aquí hay plata. Todos pagamos IVA, lo que pasa es que  invertimos mal, no optimizamos el recurso, hay despilfarro, o se lo roban, o qué sé yo… no son activos en la ejecución presupuestal. Habría que analizar en cada administración, si realmente esa es la nómina que se requiere, si la inversión social es la adecuada, la prioritaria… me parece que falta es una educación ciudadana porque realmente, plata hay. Monseñor, tres cosas que usted le pediría al nuevo Gobernador del Huila… Un país desarrollado es un país que tiene vías. Las vías son prioritarias. Hay que buscar, dentro del presupuesto nacional, que se invierta en nuestro departamento del Huila, mejorar la malla vial en alto grado y eso desarrollará poderosamente el departamento. Y segundo, la educación. La educación y la cultura ciudadana. Son los ejes fundamentales. Que los niños y jóvenes tengan buenas instalaciones, buen equipo, buena calidad humana en los docentes, buena capacitación. Algunos dicen que usted no avala al probable gobernador del Huila, Carlos Mauricio Iriarte, porque no es católico sino cristiano… ¿Es verdad? Mire, cristianos somos todos. Nosotros antes que católicos, somos cristianos. Yo no puedo ni criticar, ni objetar a una persona si la persona es buena. Una persona puede incluso ser atea…pero si respeta. A uno le duele es que alguien en nombre de Cristo hostigue a la Iglesia. Eso es lo que uno no acepta. Pero si alguien de una confesión distinta, es respetuoso y busca el bien común, respeta el hecho católico no tengo problema. Yo lo que no podré permitir es que ataquen a la Iglesia Católica.  En ese sentido, en Neiva hay un Obispo que no se callará… Yo no objeto a ninguna persona, ni soy el obispo para determinar cuál es el candidato y por quién deben votar. Los cristianos católicos son libres de votar pero votar con criterio, en conciencia, por el mejor, votar para el bien del departamento, y que seamos también atentos para que nos respeten a los cristianos católicos, respeten nuestra tradición, respeten lo que somos, y no nos hostiguen y nos combatan. “Yo critico a la clase dirigente con la que debo estar relacionada, que debo apoyar, que hace falta más sentido de huilensidad, para que se tomen las decisiones pensando en el departamento y no en el grupito, en mi partido, sino en el bien del departamento”. “De manera que el gesto del Papa Benedicto XVI, de la renuncia, me impactó positivamente hasta el punto que lo quiero más, porque tuvo la entereza de carácter, la humildad… Fue humilde y el humilde ¡es grande ante Dios! “