El secretario general del organismo, Jerome Valcke, quedó muy preocupado por el desarrollo de los trabajos de construcción que van muy lentos ante el poco tiempo que resta para la apertura de la gran fiesta mundialista.
"No quedamos satisfechos con el nivel de los servicios y la seguridad. Por eso, pedimos un segundo partido" en el estadio Arena Corinthians, afirmó en una mesa redonda con periodistas en Rio de Janeiro.
El número dos de la Fifa, que llegó a Brasil a principios de esta semana y no abandonará el país hasta después del Mundial, dijo que la condición de estadio inaugural da más importancia al estadio paulista, también conocido como Itaquerao.
"Si la Arena de Sao Paulo no fuera el estadio del estreno, no sería tan importante realizar un nuevo partido de prueba", añadió el francés.
Protestas
Respecto al clima de huelgas y protestas que vive Brasil a pocos días del inicio del torneo, Valcke se mostró seguro de que no afectarán a la competición.
"Todo puede pasar, pero nada afectará a los 64 partidos", afirmó antes de matizar que sus palabras no pretendían ser una provocación, sino un signo de "responsabilidad".
El segundo partido oficial de ensayo en el Arena Corinthians fue definido para el 1 de junio, ya que el propio Valcke expresó por Twitter que para la prueba deben estar listas las tribunas temporales.
Estas zonas son unas de las partes más problemáticas del estadio. Después de numerosos retrasos y la muerte de un trabajador en sus obras, estas gradas con capacidad para 20.000 localidades no recibieron la autorización de los bomberos para ser utilizadas durante la primera prueba oficial.
Dificultades
El partido del pasado del local Corinthians contra el Figueirense, por el campeonato brasileño, reunió a más de 36.000 hinchas y presentó importantes deficiencias en las comunicaciones, la señalización y la iluminación exterior.
También se observó cómo parte del techo estaba sin terminar y faltaban los acabados en varias partes del interior del estadio, como los palcos VIP o uno de los salones de entrada, que estaba clausurado.
Para el juego Brasil-Croacia, con el que se abrirá la Copa del Mundo 2014, se espera que el 'Itaquerao' se llene con 65.000 espectadores.
El Arena Corinthians ha costado entre 920 y 950 millones de reales, aproximadamente entre 411 y 424 millones de dólares al cambio, lo que supone un aumento de entre un 14% y 18% del presupuesto inicial. El Mundial se disputará hasta el 13 de julio próximo.
Los retrasos en las obras de construcción evitan que el escenario esté listo para el certamen orbital.