A primera hora de hoy, serán extraditados desde Colombia a Estados Unidos los sindicados por el asesinato del agente de la Agencia Antinarcóticos de Estados Unidos, Dea, James Terry Watson.
La Policía Nacional informó en un escueto comunicado que “entregará a los detenidos, a funcionarios estadounidenses que se encargarán de su traslado a Norteamérica”.
La medida de extradición afecta a Gerardo Figueroa Sepúlveda, de 38 años; Ómar Fabián Valdés Gualtero, de 27; Édgar Javier Bello Murillo, de 26; Héctor Leonardo López, de 23; Julio Estiven Gracia Ramírez, de 30, y Andrés Álvaro Oviedo García, de 21.
El agente James Terry Watson fue asesinado en Bogotá el 20 de junio de 2013, en un episodio criminal en el que estuvieron envueltos varios taxistas, tras un intento de ‘paseo millonario’ que comenzó en el parque de la 93, en el norte de la capital.
La semana pasada, el vicefiscal Jorge Perdomo dijo que era “cuestión de días” la entrega de estas personas a las autoridades de EE.UU. y que a los involucrados en el caso no les quedaban ya recursos de apelación.
El agente de la Dea, de 43 años, integraba un grupo élite de 50 hombres que realizaba misiones secretas encomendadas directamente por la Casa Blanca. Había sido asignado a la oficina que la Dea en Cartagena.
Al pedir la extradición de los taxistas, Estados Unidos argumentó que Terry Watson era una “persona protegida internacionalmente, con inmunidad diplomática”, por lo que su crimen debía ser juzgado en ese país.
De los capturados por la participación en el ‘paseo millonario’ solo se exceptúa de la extradición el taxista Ángel Mauricio Pulgarín.
Según la investigación, Pulgarín era el conductor nocturno del taxi usado en el crimen, pero no lo tenía la noche del 20 de junio porque Bello Murillo, uno de los involucrados, se llevó el automotor.