Por: Francisco Argüello
Después de meditarlo y recorrer el Huila, Jaime Felipe Lozada está decidido, al menos por ahora, a aspirar nuevamente a la Cámara de Representantes. Sin asomo de duda será nuevamente congresista. Tiene votos, es un perfil fresco, y más allá de unas pocas salidas en falso- apenas normal en la vida pública-, sabe hacer política. Su sonada e inicial aspiración a la gobernación, era incierta, un salto al vacío. Al gobernador Dussán le quedan más de dos años y medio y se desconoce cómo terminará su mandato. El dirigente conservador está organizando los equipos en Saladoblanco, Pitalito, Garzón y Neiva.
Los godos prometen no estar divididos como ocurrió cuando aspiró Chavarro a la Gobernación y algunos terminaron en brazos de Dussán. Al menos, ya definieron su lista abierta a la Cámara y Senado. La encabezará Lozada, seguido de Jorge Edilson ‘Tito Murcia’, un abogado que no ha dejado de hacer política y quien en 2018 obtuvo más de 16.000 votos. En tercer lugar estará el médico David Cangrejo, recién llegado del exterior, ex concejal de Neiva, con menos probabilidad de alcanzar una curul. El cuarto cupo será para una mujer de Colombia Justas Libres, el partido con el que se congregó el conservatismo para las legislativas. Al senado, apoyarán a Esperanza Andrade.
La idea es juntar las dos casas políticas: una escuálida Integración Conservadora que muere pasadas las elecciones, pero revive a escasos meses de los comicios, y la casa Andrade que sigue vigente, con un Hernán en la distancia, pero con el mismo poder que ostentaba cuando lucía su curul.
Aunque es temprano, promoverán la gobernación de Sandra Hernández, diputada, una de las voces más críticas de la Asamblea. Ella tiene casi asegurada la Alcaldía de Pitalito por su cercanía con los laboyanos, pero prefiere cederle el cupo a Franklin Vega, su amigo, el secretario de gobierno de Luis Enrique Dussán. Sería fantástica alcaldesa, pero ella luchará por el escaño regional. Mientras Jorge Fernando Perdomo intentará ‘coronar’ la Alcaldía de Neiva, un trabajo que no será fácil. Al fin y al cabo German Casagua, según sondeos internos, registra preferencias por encima del 20 por ciento, una cifra atractiva, aunque susceptible de derrotar a más de dos años de las elecciones.
Carlos Ramiro Chávarro dividirá su corazón: en una mínima porción con el senado de Esperanza Andrade y la tajada más grande con Alfredo Deluque, su cuñado guajiro.
Nota uno: Ya que hablamos de política y aunque insiste en negarlo, el nombre de Juan Carlos González, director del Setp, sigue pegando fuerte al interior del gorkysmo para la Alcaldía de Neiva. Varios empresarios, líderes y dirigentes le siguen sacando ganas. Es joven, piloso, reflexivo y profesional. Él niega cualquier campaña política, pero el Sistema Estratégico de Transporte Público, uno de los mejores del país, según el Gobierno Nacional, podría ponerlo a dudar a futuro. Al fin y al cabo, en sus manos tiene las obras más grandes que le esperan a Neiva en los próximos tres años. Se mueve el sonajero.