Esta es la historia de Víctor Alfonso Ultengo Sánchez, quien confesó haber participado en el homicidio del joven Eliecer Yusunguaira el pasado 21 de diciembre de 2014. La víctima fue ultimada de un disparo con arma de fuego en la frente, cuando se interpuso en medio de un robo que le hacían a su hermano.
A 12 años de prisión sería condenado por un Juez con Funciones de Conocimiento de Neiva, Víctor Alfonso Ultengo Sánchez, luego de que éste suscribiera un preacuerdo con la Fiscalía General de la Nación.
Así lo dieron a conocer las partes ayer en la audiencia preparatoria al juicio oral que se desarrolló dentro del proceso penal que se le adelanta a Ultengo Sánchez por los delitos de homicidio en concurso con fabricación, tráfico y porte de armas de fuego o municiones.
El imputado, quien se encuentra actualmente recluido en la cárcel de Rivera, aceptó su culpabilidad y renunció al juicio oral por virtud del preacuerdo, con el que obtendrá un rebaja del 50 por ciento de la pena que le impondrá el juez en sentencia condenatoria.
Así pues, de una pena de 288 meses o 24 años de prisión, le quedaría en solo 12 años de prisión en centro carcelario al recibir como beneficio la rebaja única de degradarle el grado de participación de coautor a cómplice, ya que Ultengo Sánchez no actuó solo, sino en complicidad con Jhon Fredy Díaz Rojas, quien también ya preacordó con la Fiscalía y recibió condena.
Lo mataron por defender a su hermano
La Policía Judicial y la Fiscalía afirman que como resultado de la investigación adelantada, con unas entrevistas, denuncias, reconocimientos fotográficos y declaraciones juramentadas se pudo inferir plenamente la participación de Víctor Alfonso y Jhon Fredy Días Rojas, en la muerte del joven de 19 años de edad, Eliecer Yusunguaira ocurrida en el municipio de Campoalegre.
Según indicó la Fiscalía, para el día 21 de diciembre de 2014, Luis Carlos Yusunguaira, hermano de la víctima, se encontraba con Junior Carvajal parados en la Calle 17 con Carrera 7 esquina en el centro de Campoalegre, luego de salir de un bar a eso de las 3:00 de la madrugada.
De repente, aparecieron dos sujetos que se movilizaban en una moto AX100, uno era Víctor Alfonso Ultengo Sánchez quien iba como parrillero y el otro Jhon Fredy Díaz Rojas quien conducía el velomotor.
Eliecer Yusunguaira, fallecido.
Ambos se pararon frente a ellos amenazándolos, Ultengo Sánchez sacó un revólver y les dijo que se bajaran de lo que tuvieran. En el momento que el parrillero le colocó el arma en la cabeza a Luis Carlos Yusunguaira, su hermano Eliecer quien se encontraba cerca del lugar en un toldo de venta de empanadas observó lo que estaba sucediendo y se vino y les dijo a esas personas que no robaran a su hermano, que no le fueran a hacer daño que él no tenía nada.
Pero Ultengo Sánchez reaccionó disparando. La bala rozó y afectó una de las cejas de Luis Carlos pero Eliécer, quien se encontraba detrás de él, recibió el proyectil directo en su frente, falleciendo en el lugar de los hechos.
Al lugar acudieron miembros del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) para realizar el levantamiento del cuerpo. “Se sabe que los homicidas son del pueblo y se está avanzando en su identificación”, manifestó en ese entonces la Policía en Campoalegre.
La captura
Víctor Alfonso Ultengo Sánchez finalmente fue capturado por orden de captura el 29 de marzo de 2015, ese mismo día le realizaron audiencias preliminares ante el Juzgado Único Promiscuo Penal Municipal con Funciones de Control de Garantías de Santamaría Huila que legalizó la captura, y la Fiscalía Novena seccional le formuló cargos por los delitos de homicidio y fabricación, trafico, porte o tenencia de armas de fuego, accesorios, partes o municiones. El imputado no aceptó en ese momento cargos y quedó privado de su libertad en establecimiento carcelario.
Antes de ser capturado, Víctor Alfonso Ultengo Sánchez, de 29 años de edad, residía en el barrio San Carlos del municipio de Campoalegre.
Un humilde jornalero
Según relató la madre de Eliécer, él se dedicaba a las labores de fumigación de cultivos de arroz y otras veces recogía algodón. La víctima junto a su madre y sus hermanos eran desplazados del sector de Filo Alto, zona rural de Campoalegre, vivieron por un tiempo breve en Neiva. Luego que el orden público de Campoalegre se normalizara, decidieron retornar, pero esta vez al barrio Panamá del casco urbano del municipio.
· Con información de OLE MI DIARIO.