La Nación
EDITORIAL

Huila bajo amenaza sísmica

Los dos sismos registrados el domingo pasado con magnitud de 5,2 en la escala internacional de Richter, con epicentro en el municipio de Colombia, demostró no sólo la alta vulnerabilidad del Huila. También ratificó que los simulacros no han servido para educar a la comunidad en casos de emergencia.

El desorden y la incertidumbre terminaron generando pánico en muchos sectores. El caos en los centros comerciales fue una clara demostración del desconocimiento  y la poca preparación para actuar ante estos eventos. La desinformación por el mal uso de las redes sociales contribuyó a generar el desasosiego y a fomentar el caos. Por fortuna estas reacciones no generaron desgracias.

En cambio, los dos temblores provocaron daños de consideración en por lo menos 50 viviendas y colapsó varias vías terciarias, especialmente hacia la región de Santa Ana.

El fenómeno geológico se presenta días después de haber salid de una grave emergencia, de las tres que se han registrado este año, dejando incomunicado este sector. Ahora el drama se repite.

Las autoridades deben reaccionar a tiempo no solo para mitigar los daños causados en las vías y las viviendas, sino para el manejo social de la emergencia frente a los damnificados y las dificultades para la comunicación terrestre.

La ocurrencia de los fenómenos aunque imprevisibles, hay probabilidades de ocurrencia en algunas regiones como el Huila como ha quedado corroborado en numerosos estudios de amenaza sísmica.

Colombia es una de las regiones más propensas a movimientos tectónicos que hay en el mundo. Según el mapa de amenaza sísmica Huila, Putumayo Chocó, Risaralda, Quindío, Caldas, Valle del Cauca, Cauca, Nariño, Santander y Norte de Santander están en zonas de alto riesgo.

En el mapa global de riesgo sísmico, el Huila está en rojo. Las características geológicas de la zona registran una alta probabilidad de ocurrencia de eventos sísmicos de magnitud importante. Por lo menos 15 municipios del Huila, con fallas geológicas activas,  están en este mapa de amenaza comenzando por Neiva, Acevedo, Algeciras, El Agrado, Aipe, Baraya, Colombia, Garzón, Guadalupe, La Argentina, El Pital, Suaza, Teruel y Tesalia.

Adicionalmente, los 37 municipios del Huila  son altamente propensos a amenazas por erosión, erupciones volcánicas, deslizamientos, crecientes torrenciales, avalanchas, desbordamientos, inundaciones e incendios forestales como ocurre en las terrazas del río Magdalena y en las 16 cuencas hidrográficas.

En el sur del país están las principales fallas geológicas. Entre ellos figuran las fallas de Romeral, del Borde Llanero, la Chusma-La Plata y la falla del Magdalena.

Adicionalmente el Nevado del Huila, en actividad sísmica desde hace varios años, genera otro riesgo potencial para toda su zona de influencia.

Pese a esta realidad, el Huila no ha asumido con seriedad estas amenazas. Reacciones sin planear, como las registradas el domingo pasado, demuestran que no estamos preparados para enfrentar una amenaza sísmica.
 

 
“En el mapa global de riesgo sísmico, el Huila está en rojo”.

 
EDITORIALITO
 
Aunque bajó levemente, el desempleo en el Huila sigue siendo alto. Neiva se ubicó entre las diez ciudades con la mayor tasa de desocupación comparativamente con el 2015. ¿Aumentó la informalidad?