El gobierno nacional tiene amplias facultades legales para intervenir entidades tal como lo hizo con Saludcoop en el 2011, lo que no conocíamos era que tuviera la potestad para quebrar una entidad intervenida.
En dicho año Saludcoop tenía un patrimonio superior a los $500.000 millones, luego de cuatro años en poder del gobierno, con interventores designados por la Superintendencia Nacional de Salud, es ordenada su liquidación con un patrimonio negativo de $800.000 millones, o sea una pérdida total de patrimonio cercana a $1.3 billones, aproximadamente $325.000 millones por año.
Pero la debacle no es solo financiera, de la prestación del servicio de salud en el que los afiliados gozaban de adecuada oportunidad y ciertas comodidades incluidas habitaciones individuales con TV satelital y aire acondicionado como en la clínica de Neiva, se pasó a un tortuoso viacrucis para conseguir una cita u obtener una remisión y con clínicas cerradas por falta de mantenimiento de ascensores.
Lo inaudito del asunto es que los nuevos administradores de Cafesalud, EPS a la que le pasaron todos los afiliados de Saludcoop, son los mismos que venían administrando la entidad liquidada, insólito premio para quienes con su deficiente gestión quebraron la EPS del sector solidario.
Todo esto en manos del gobierno que le pareció muy grave que los anteriores administradores giraran unos cheques y los descargaran de la contabilidad sin entregarlos y por eso la intervino, pero no se inmutó cuando los administradores actuales llevaran la EPS hasta la quiebra y hasta resulta nombrándolos para que manejen la nueva figura, asegurándonos que se encuentran preparados para garantizar la prestación del servicio que en los últimos años deterioraron hasta su postración.
Que el Ministro de Salud, Alejandro Gaviria, y el Superintendente de Salud, Norman Julio Muñoz, no se presenten como héroes así hayan diseñado un esquema para tapar sus propios errores y salvar el pellejo, expidiendo a su acomodo curiosos decretos que permiten tomar dinero del FOSYGA, que le adeuda billones a todas las EPS incluida Saludcoop y Cafesalud, para cubrir una quiebra que ellos mismos provocaron. Que no les quede duda, siempre les recordaremos que fue en sus manos, no en las del cuestionado Palacino, que se quebró Saludcoop.
Se ha estrenado una nueva facultad por parte gobierno nacional, la autorización para quebrar las entidades que interviene sin que nadie responda, los medios y la galería se limitarán a reclamar justicia para los administradores de Saludcoop involucrados en dudosos manejos, mientras quienes la quebraron siguen campantes en sus cargos.
garcia.francisco@javeriana.edu.