La Nación
OPINIÓN

¿Qué nos lleva a tomar malas decisiones?

En general, a las personas no nos gusta tomar decisiones. Incluso a veces las posponemos y las dilatamos en el tiempo esperando a que sean las circunstancias u otras personas las que la tomen por nosotros/as. Pero ¿qué pasa en esos momentos en los que sí quieres tomar una decisión pero no sabes si será la correcta? ¿te quedas bloqueado/a?

Muchas personas suelen encontrarse en una situación de la que no saben cómo salir. Se sienten pérdidas, estancadas y un poco a la deriva, no saben qué quieren ni cómo han llegado hasta donde están.

Evita enfocarte en decisiones correctas o incorrectas Si quieres no solo tomar decisiones con las que te sientas satisfecha, sino llevar una vida plena, es fundamental tener un buen ancla, algo que te mantenga segura y firme independientemente de lo que suceda a tu alrededor. Esa ancla no es más que lo que tú más valoras en la vida y determinará las acciones y decisiones que tomes.

Además, te ayudará a mantenerte en tu sitio independientemente de las opiniones o críticas de los demás. Eso sí, para que el ancla cumpla con su papel, independientemente de las tormentas que se avecinen, es fundamental que sea fuerte y estable, que se enganché sobre la roca fuerte, porque si no es así, cuando venga la lluvia, o las tormentas o los fuertes vientos de la vida se derrumbarán los sueños, los ideales y los proyectos y entonces vienen los fracasos y sufrimientos.

El problema surge cuando lo que has elegido como ancla es una persona o una circunstancia determinada, porque tanto las personas como las circunstancias cambian continuamente y, por tanto, no son buenas opciones como ancla. Pueden funcionar bien durante un tiempo, mientras esa persona o circunstancia se mantenga estable. Pero ¿qué pasa si desaparece de repente? ¿Qué pasa si cambia tanto que tú te encuentras a disgusto? Te sentirás completamente desorientado y perdida, te habrás quedado sin ancla y no sabrás qué hacer, y te sentirás a la deriva.

Por eso debes anclar tu vida en equilibrio a tus valores… Los valores son pautas de comportamiento que se establecen para guiar la forma de Actuar… Tú tienes la libertad de elegir y escoger libremente… Pero aunque todo es lícito, no todo nos conviene.

Si tu valor principal es la justicia, pase lo que pase en tu vida o en tu entorno siempre podrás identificar qué es justo y qué no, y que eso te guíe a la hora de actuar y tomar decisiones. Aunque la decisión sea dura y dolorosa, lo que es justo es justo, ¿o no?

¡Recuerda tu intención!

Es muy importante para tomar una decisión recordar cuál es tu intención. Hay una o varias implícitas en cada cosa que hacemos, otra cosa es que seamos conscientes o no. Así que! Comparte tu intención con personas savias, y recibe un buen consejo de estas… Muchas veces la respuesta a estado a tu lado y tu autosuficiencia te ha llevado a cometer errores irreversibles.

Muchas veces podemos llegar a pensar que las decisiones que tomamos no fueron las adecuadas porque quizá no teníamos muy claro a dónde queríamos llegar, Cualquiera que sea la duda que tengas tiene que ver mucho con la intensión con la quieres hacer las cosas Así que siéntate a pensar cuáles son tus valores principales, tu ancla. Para que a partir de ahora tengas más claro si lo que haces es congruente con lo que es importante para ti.

El interpretar las situaciones correctamente es una de las destrezas de vida más útiles para cualquier ser humano. Tener claridad para percibir  con sabiduría  y discernimiento es la clave del éxito en cualquier situación.

El problema es que muchas cosas interfieren con interpretar correctamente las situaciones de nuestra vida. Nuestros deseos y miedos con frecuencia nublan nuestra visión y como interpretamos lo que vemos.

Nuestros deseos nos dirigen, pero pueden llevarnos a las situaciones más torcidas si no los frenamos con la razón. Nuestros miedos nos ciegan en percepción y juicio. Cuando no estamos en paz se hace difícil tomar una buena decisión.

Así que te desafío a que pienses sobre cualquier decisión de peso en tu vida. Pregúntate sobre que has anclado tu anhelo, tu deseo o tú proyecto y revisa si estas siendo coherente con tus valores eso te  podría llevar a tomar una mejor decisión.

Pero recuerda que aunque las cosas no siempre salen como se han planeado o deseado… todas ellas nos ayudan para bien… Lo importante es NO detenernos… Si no mirar siempre hacia delante; recuerda tu no eliges… Tú despides!

LILIANA JIMÉNEZ ROBAYO
ASESORA DE FAMILIA
CEL. 3108761019