La Nación
"Agenda Prospectiva" y Plan Departamental de Desarrollo 2024-2027 1 28 abril, 2024
COLUMNISTAS OPINIÓN

“Agenda Prospectiva” y Plan Departamental de Desarrollo 2024-2027

El desarrollo rural, la equidad en el acceso a la tierra y la soberanía alimentaria son pilares fundamentales para una sociedad equitativa y sostenible. En el Huila, los llamados a la acción para abordar estas áreas están perfectamente planteadas en el documento “Agenda Prospectiva”, el cual se presenta como una oportunidad invaluable para influir en el Plan de Desarrollo 2024-2027, “Por un Huila Grande”.

El gobernador del Huila, Rodrigo Villalba Mosquera, junto a su equipo de trabajo, tiene ante sí una herramienta prospectiva, creada desde la base de la comunidad a través de una amplia consulta que abarcó nueve ejes temáticos, entre los que se destaca el desarrollo rural, tierras y soberanía alimentaria. No obstante, el camino hacia una implementación efectiva de dicha agenda implica no solo reconocerla sino integrarla plenamente en la planificación y ejecución de políticas, en este caso el Plan de Desarrollo 2024-2027, “Por un Huila Grande”.

La “Agenda Prospectiva” advierte sobre la crisis que enfrenta el departamento debido a la injusticia social y climática. El Huila soporta un índice Gini de desigualdad en el acceso a la tierra de 0.8, alarmantemente alto. Esta desigualdad se manifiesta en la concentración de tierras, la informalidad en la propiedad y el desplazamiento de comunidades por proyectos extractivos. Las consecuencias son evidentes: la población rural sufre limitaciones en vivienda, educación, salud y saneamiento básico, con infraestructuras precarias.

La “Agenda Prospectiva” propone una reforma rural integral que abarque modelos agropecuarios regenerativos y agroecológicos, así como la garantía de acceso a la tierra y la legalización y adjudicación de tierras a quienes más lo necesiten. Esta reforma también sugiere la creación de biofábricas para la regeneración de suelos y producción de alimentos, así como el rescate de semillas nativas.

La presencia de actores armados irregulares es otro desafío que debe ser abordado para permitir el avance de los proyectos sociales y económicos. Además, es importante avanzar en la educación rural, respetando los saberes locales y ancestrales, y promover la economía solidaria y el cooperativismo.

En conclusión, el Plan de Desarrollo del Huila tiene una oportunidad única de integrar una visión a largo plazo que no solo responda a las necesidades inmediatas sino que también siembre las semillas para un futuro sostenible y justo. Hago un llamado para que el Gobernador Villalba Mosquera y su equipo trabajen mano a mano con las comunidades para que la voz del pueblo, reflejada en la “Agenda Prospectiva”, se convierta en la base para un “Huila Grande”.